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Mensajes - Ludonavegante

18Cuba

Muy buenas a todos y todas. Os paso una prerreseña del 18Cuba, recientemente publicado por Lonny Orgler. Se trata de una prerreseña porque únicamente he analizado las reglas y pretendo mostrar un esbozo de las sensaciones que ofrece. En todo momento estoy suponiendo una partida a 4 jugadores.

La estructura del juego sigue todas las pautas habituales de los 18XX: una subasta inicial de privadas y rondas de acciones seguidas por entre una y tres rondas de operaciones en función de la fase.

Existen dos tipos de certificados similares a las privadas: los comisionados y las concesiones, aunque operan de forma significativamente diferente a otros títulos de la serie 18XX.

Los comisionados son miembros de la Junta de Caminos de Hierro. Otorgan la posibilidad a quien los posee de colocar una loseta en fase amarilla, verde o marrón (el juego tiene hasta losetas grises). Son 6 en total. Su rentabilidad es implícita, es decir, se comienza la subasta por cero, y cuando se coloca la loseta, se cobra. La rentabilidad está en la diferencia entre lo que se pagó en la subasta y lo que se cobra después. Por lo general, los precios que paguemos deberán ser tales que la rentabilidad de los comisionados de losetas marrones sea mayor que la de los verdes y estos a su vez que los de amarillas, porque lo cobramos más tarde. Ahora bien, está por ver si los jugadores valoran más poner una loseta verde o marrón que una amarilla. También hay otro elemento que tenderá a presionar el precio al alza y que, en cierto modo, está presente en muchos juegos: el jugador que más gasta, gana la prioridad en elegir certificado (en otros juegos se trata de la prioridad en la SR1, pero como veremos, esta opción se parece mucho). La subasta es en orden y uno a uno.

Las concesiones se parecen mucho a las privadas habituales, salvo que su rentabilidad es inmediata y que se compran en un draft. Todas excepto la primera, dan una capacidad especial y un descuento para abrir una compañía menor. Su rentabilidad se mide por la diferencia entre el precio que se paga y el descuento de 210 que otorgan para abrir una menor en SR1. Si no se abre la menor en SR1, se pierden. No se cierran cuando se abre la menor y no otorgan rendimientos a lo largo de la partida, ni tampoco se compran por empresas, sino que otorgan una habilidad a utilizar con empresas menores o mayores por su poseedor.

Lo normal es que, a cuatro jugadores, sin haber afinado los cálculos al milímetro, acabemos con una empresa menor y una mayor, uno o dos comisionados y una concesión, y que a lo largo de la partida abramos alguna otra mayor más o tratemos de hacernos con el control del Ferrocarril Central. Además, al principio es posible que los fondos sobrantes los empleemos en esta empresa pues es la única que empieza con un tren nada más operar.

El sistema de subasta de privadas no permite una jugada habitual en muchos juegos estilo 30: compro la privada por el doble y abro una compañía relativamente pronto que compra trenes para descartar los trenes de los adversarios. En todo caso, si está acorde con lo que se suele hacer en otros juegos de capitalización incremental, que no permiten hacer este chanchullo.

Cómo se desarrolla el juego

En el juego se juega con 8 empresas mayores (10 acciones), 6 menores (5 acciones) y una nacional (Ferrocarril Central).

La única estación de la menor se denomina "molino de azúcar". Corre trenes por vía estrecha, solo desde su molino (estación) a campos de azúcar (losetas con pueblo en otros juegos). A diferencia de lo que ocurre en el 1858 o en el 1849, en marrón no hay vía dual, es decir, que la vía estrecha siempre se actualiza a vía estrecha. Los trenes de las menores son específicos de estas y no valen para la mayor. No puede hacerse tampoco el chanchullo de comprar trenes entre compañías mayor y menor. Empiezan el juego con el 60% de su capital y el otro 40% comienzan en el charter en forma de acciones, que al comprarlas por los jugadores o ser emitidas por la compañía, se convierten en capital (capitalización incremental). Además de comprar trenes, las compañías menores pueden comprar máquinas, que incrementan sus ingresos y su producción de azúcar (cubitos). Por tanto, se trata de un modelo de menor que es capaz de crecer hasta el final, que no se fusiona, y cuyo crecimiento es interesante. Además, tiene precio de acción que cambia a lo largo del tiempo con lo que afecta a la riqueza.

Las empresas mayores son las que se parecen a las habituales de los 18XX: empresas de 10 acciones con capitalización incremental Se fundan con el 50% comprado (a diferencia de las menores que es con el 60%) y se obtiene capital por las acciones que se van comprando, típico también de la capitalización incremental. Los marcadores de estaciones que tiene son 4, pero dos de ellos solo se obtienen cuando queda el 30% ó el 0% del capital por desembolsar. Las empresas mayores corren rutas por ciudades grandes (por los “pueblos” o campos de azúcar solo van las menores) y hacia los puertos. El acceso a los puertos es fundamental porque a ellos se llevan los cubitos de azúcar. Cada cubo da 30 de ingresos y el número de cubos está limitado por la capacidad de tus vagones (es un tipo de tren especial). Claro está, como es propio del sistema pick and deliver, dejar a tus adversarios sin cubos es clave para que tus carreras hagan más, con lo que se añade una dimensión adicional de por qué el orden en el que operan las compañías mayores es importante.

Hay además varios tipos de trenes: normales, vía estrecha, trenes + (permiten saltar un bloqueo de estaciones pero son más caros) y trenes que duplican el valor de las localizaciones de ingresos pero que no pueden transportar azúcar. Por lo demás, los trenes se descartan como en otros 18XX con mecanismo de exportación, pero en este caso, los permanentes también son exportados, lo que genera un train rush potente (aunque no como en los juegos de capitalización total, donde la alta disposición de fondos de las empresas puede incentivar el juego agresivo). Únicamente debe desatacarse que los T4 de las menores son semipermanentes (pierden efectividad pero no se descartan).

Hay otro tipo de empresa mayor, que es el Ferrocarril Central, que ya empieza operando en la primera ronda de operaciones. Pone estaciones a lo largo de todo el mapa de forma automática y, por tanto, aumenta los bloqueos, y obtiene ingresos por alquiler de sus estaciones por otras compañías mayores (lo que permite saltar un bloqueo), por correr un tren y por los cubos de azúcar que no se usan y es la que compra el tren que se exporta cada set de rondas de operaciones. Es la típica empresa nacional presente en otros juegos (1822MX, 1861, 1848…), pero parece que tiene un punto de interés mayor que otras propuestas de otros juegos.

Los bloqueos deben de ser una cuestión interesante en este juego. El mapa es pequeño y alargado y la limitación de ancho de vía no debe facilitar correr trenes grandes.

En cuanto a las losetas, son del estilo de Lonny, ni son fáciles de hacer ruta como en el 1817 o en el 1822 porque permiten multitud de giros en las diversas actualizaciones de loseta, ni son tan restrictivas como el 1830 y algunos de sus derivados, que por ejemplo no tienen loseta amarilla de ciudad con giro.

Mercado de acciones

El mercado es de zigzag, es decir, sin suelo, pero con saltos por ventas menos intensos, aunque baja el precio un escalón por cada certificado vendido. Es un modelo intermedio entre los mercados más estáticos y los más agresivos y proviene, hasta donde yo sé, de juegos como el 1860 o 1862. Debe destacarse la importancia que tiene el mercado por cómo influye el orden de turno a la hora de hacerse con los cubos de azúcar, no solo a la hora de hacerse con trenes buenos antes que nadie. Los pagos de dividendos permiten varios saltos del precio de la acción, como ocurre en otros juegos de capitalización incremental. Por lo demás es un mercado con las reglas habituales del 1830, pero sell-buy, en lugar de sell-buy-sell.

La prioridad se obtiene por ser el jugador que más pasta tiene al final del turno, como en otros juegos de Lonny (18CZ, por ejemplo).

Variantes

El juego viene con variantes para 2 y 3 jugadores en formato corto o largo, para adaptar la duración y el tipo de juego a las circunstancias. Cambian aspectos como, el número de empresas y de trenes con los que se comienza y la parte del mapa en la que se juega.

en: 29 de Octubre de 2022, 21:53:19 2 LUDOTECA / Dudas de Reglas / Re:Almoravid (Dudas)

Bueno, parece que no hay mucha gente jugando al juego pero yo insisto.

Fase de artes de guerra: robo dos cartas y aplico eventos. Puedo comprar también las capacidades para mis lores.

Suministro: cada ciudad con el sello del lord sólo puede dar un suministro? O pueden venir varios del mismo sitio?

Parias: si un territorio es una paria, nadie puede conquistar sus ciudades ya que son neutrales?
Exacto, no se puede conquistar un a paria . Pe o ojo, las ciudades que tengan marcador de Jihad no son neutrales.


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en: 29 de Octubre de 2022, 21:49:05 3 LUDOTECA / Dudas de Reglas / Re:Almoravid (Dudas)

Bueno, parece que no hay mucha gente jugando al juego pero yo insisto.

Fase de artes de guerra: robo dos cartas y aplico eventos. Puedo comprar también las capacidades para mis lores.

Suministro: cada ciudad con el sello del lord sólo puede dar un suministro? O pueden venir varios del mismo sitio?

Parias: si un territorio es una paria, nadie puede conquistar sus ciudades ya que son neutrales?
En la fase de Artes de la Guerra robas las dos cartas y aplicas eventos sí. Después, dentro de la leva, harías muster, que consiste en, con cada uno de los Lords que estén en territorio amigo pueden gastar puntos de liderazgo para:
-Elegir cartas de artes de la guerra.
-coger transporte
-hacer tiradas para convocar a otros Lords (cada tirada un punto de liderazgo y se puede repetir tirada)

Lo del suministro no funciona exactamente así. Suministro es una de las acciones que pueden ejecutar sus Lords y consiste en traer provisiones desde su Seat (creo que tú lo has traducido como sello). Un Lord que tiene 4 en command podría en su turno ejecutar una acción de suministro 4 veces y te 4 provisiones si tiene el transporte adecuado para traerlas. Es más, si Alfonso tiene el transporte adecuado, puede con una acción de suministro obtener dos provisiones porque tiene dos seats. Pero tiene que tener transporte suficiente para llevarlas desde Burgos y León hasta donde esté.


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en: 29 de Octubre de 2022, 21:37:29 4 LUDOTECA / Dudas de Reglas / Re:Almoravid (Dudas)

Muy buenas a todos.
Una duda sobre la primera fase de “Artes de Guerra”
Dice que cada bando roba dos cartas como capacidad (parte inferior de la carta) y esas cartas van al tablero de un Lord o al lado del tablero de ese bando.
Entiendo que si la carta robada coincide con el escudo de un señor activo puede ponersele debajo, pero eso puede hacerse también con las cartas que valen para cualquier Lord? O esas hay que “compararlas” en la fase de leva.

Gracias
Buenas:

Un amigo me ha llamado la atención sobre tu mensaje. Estoy en el torneo de Vassal de y ya le he hechado como 7 partidas, incluyendo una media campaña en mesa.


Las cartas de Artes de la Guerra, como sabes, se roban siempre al principio de cada turno de leva como eventos (es decir, que lo que se aplica es la parte de arriba). Esto es, se roban dos cartas aleatorias y las que las que no son hold se ejecutan inmediatamente y las hold se dejan dadas la vuelta para el momento oportuno.


Como bien dices, en el primer turno hay una excepción: no se roban dos eventos sino dos cartas al azar que se juegan directamente como capacidades. Hay dos tipos de capacidades: las que se ponen en el tablero o las que ponen en el Lord. Eso no tiene que ver conque puedan ser jugadas o no con todos los Lords.

Las cartas en las que en el texto dicen "this lord" solo pueden jugarse en un Lord y el resto se juegan en el tablero. Así que, si al robar una carta al azar, en la carta pone "this lord", tienes que ponérsela al lord de tu elección cumpliendo con la restricción de que, o bien aparezca su escudo, o bien pueda ser una carta para cualquier lord.


Por ejemplo, fíjate en "Cabalgadas" de los cristianos. En el lado izquiero pone el símbolo de any lord. Así que se la puedes colocar a cualquiera. Sin embargo, El Cid solo vale para Rodrigo Díaz de Vivar.

Por otro lado, si hubieras sacada "Caballería Villana", la pondrías debajo del tablero porque es una capacidad que no va dirigida a
"this lord".

También, dentro de la fase de leva, después de robar cartas, se pueden usar puntos de liderazgo para coger capacidades del mazo de ambos tipos. En este caso, ya no es al azar: eliges la carta.

Las reglas para las dos cartas que se extraen al azar como capacidades en el primer turno y para realizar la acción de muster durante la fase de leva son
las mismas, solo que, obviamente, las que se roban al azar no cuestan puntos de liderazgo.

Precaución: con los musulmanes hay muchas cartas que solo pueden jugarse con los Taifa Lords. Sir y Yusuf NO SON TAIFA LORDS. Te lo digo porque
es un error muy frecuente.


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en: 06 de Febrero de 2022, 02:28:21 5 KIOSKO / Reseñas escritas / 18MAG: HUNGARIAN RAILWAY HISTORY (Reseña)

18Mag: un 18XX singular.

Hace tiempo que quiero contribuir a la comunidad de los 18XX de algún modo. Cuando uno es apasionado de algo, tarde o temprano siente la necesidad de aportar su granito de arena. Y es lo que me pasa a mí con estos juegos.

Además de hacer alguna incursión en el podcasting hablando de esto, he decidido lanzarme a hacer alguna reseña, como a mí me gusta hacerlo, no con el ánimo de poner una nota, que entiendo que os servirá de poco, sino de intentar desentrañar las motivaciones detrás del diseño de cada título y destacando sus principales características. Con ello pretendo contribuir a que el aficionado o la aficionada tenga elementos para discernir si: “este no es para mí” o “este es de los míos”.

Aviso que, lamentablemente, la mayoría de mis reseñas estarán basadas en el juego on line. Entre la pandemia y mis circunstancias personales actuales, se me hace complicado sacar tiempo para jugar en mesa. Es verdad que no es lo mismo la mesa que jugar por internet en asíncrono, que es como yo lo hago habitualmente. Pero sirve bastante para hacerte una idea.

Hecha esta breve introducción, vamos directamente al título objeto de la reseña: 18Mag. Fue publicado en 2021 por Lonny Games, la editorial del diseñador, Lonny Orgler. Fiel al espíritu de este  autor, que gusta de innovar, se trata de un 18XX muy controvertido: hay quien incluso ni lo considera 18XX. Yo soy muy poco amigo de los debates nominalistas; me interesa más que sepáis de qué va el juego y transmitiros las sensaciones que a mí me ha generado (y ya puestos, contrastar con las de los que habéis jugado el juego). Cada cual que piense lo que quiera sobre si es un 18XX o no lo es.



18Mag narra el desarrollo del ferrocarril en Hungría (su nombre viene de Magyarország, Hungría en el idioma del país) promovido por los jugadores, que son propietarios de empresas de ferrrocarril y accionistas de compañías que prestan servicios a estas empresas. Como en todos los 18XX, se alternan rondas de acciones, en las que se compran y venden acciones, en este caso, de las empresas prestadoras de servicios, y rondas de operaciones en las que las empresas ferroviarias construyen vías y estaciones, compran trenes e ingresan dividendos gracias a sus rutas. El jugador que al final de la partida ha obtenido más riqueza es el ganador.

Si bien el juego se refiere a la historia del ferrocarril en Hungría, durante el siglo XIX este país pertenecía al Imperio Austro-Húngaro, y el Reino de Hungría, parte de dicho imperio, abarcaba territorios no solo de la Hungría actual, sino también de Eslovaquia, Rumanía, Eslovenia, Serbia y Croacia. De hecho, un detalle del juego es que el mapa para 3 o más jugadores es el de la Hungría decimonónica y el de 1 ó 2 jugadores es el de la Hungría actual.


Mapa a partir de 3 jugadores.


Mapa para dos jugadores y para el modo solitario.

El juego comienza con un draft y aquí llama la atención su primera nota diferenciadora: los jugadores empiezan sin dinero. Los jugadores deben seleccionar dos o tres compañías menores y una o dos acciones de una compañía prestadora de servicios, en función del número de jugadores, en un orden de draft peculiar, que entiendo que pretende equilibrarlo. Por ejemplo, para 3 jugadores sería 1-2-3, 2-3-1, 3-1-2 y así sucesivamente. Nótese que, a diferencia de otros juegos (aunque no es el único, el 1862 tampoco las tiene), este juego no tiene privadas, es decir, compañías que dan una rentabilidad fija a los jugadores, se venden a las compañías y proporcionan a estas una capacidad especial. No tendría mucho sentido haber incluido privadas, dado el papel que juegan las compañías prestadoras de servicios, pareciéndose alguna de ellas a las privadas de otros juegos (por ejemplo, la G&C de este juego que te permite sumar los ingresos de los pueblos sin contarlos para el alcance del tren, es igual a los pullman del 1822).


Detalle de las tarjetas que representan las compañías menores.


Detalle de las empresas prestadoras de servicios.

Las compañías menores que se seleccionan al principio, se mantendrán hasta el final de la partida, y su valor no incrementa, ni se pueden vender, convertir en compañías grandes o fusionar. Siendo la inclusión de menores una mecánica ya habitual de los 18XX, presente en otros títulos como el 1822, el 18NE, el 1861/67, o el 1824, lo que es único de este juego es que se mantengan las menores obligatoriamente hasta el final de la partida.

Jugar con menores solamente y que estas nunca puedan fusionarse o convertirse en mayores, es algo que a muchas personas puede no gustar. En todos los juegos las menores están más constreñidas en lo que pueden hacer: el reparto de dividendos, el número de trenes, el número de estaciones o los saltos que puede dar su precio en el mercado por un reparto de dividendos (si es que tienen precio). En este juego, sólo pueden tener dos trenes y siempre reparten el 50% y se quedan la otra mitad. La ausencia de fusiones o conversiones priva a los jugadores de la experiencia de la decisión de cuándo fusionar y de la flexibilidad mayor de la que disponen las empresas más grandes,  como ocurre en el 18CZ, el 1861/67 o el 1822.

Pero este juego va de otra cosa. Va, de explotar sinergias entre empresas prestadoras de servicios y empresas ferroviarias, de poner vías y estaciones y de decidir cuáles van a ser tus trenes y cuándo comprarlos. Añadir fusiones y empresas mayores no habría tenido mucho sentido. Habría complejizado muchísimo el juego y habría desviado la atención de las empresas prestadoras de servicios y las sinergias con las ferroviarias. Además, el uso de menores tiene como principal ventaja el desarrollo rápido del mapa. Los jugadores pueden poner hasta dos losetas por compañía. Si hay 12 compañías en el mapa (son 13, pero siempre una se queda fuera), se pueden llegar a colocar hasta un máximo  24 losetas en una ronda de operaciones, desde la primera ronda. En los juegos de la familia del 1830 con mayor número de compañías como el propio 1830, a lo mejor se pueden colocar 5 losetas en una ronda de operaciones al principio. Eso, junto con la configuración del mapa, permite que una gran mayoría de las empresas puedan operar dos trenes, fluyendo rápidamente el dinero y la compra de trenes. Esto no ocurre por ejemplo en el 18New England, donde solo se puede colocar una loseta por ronda y la mayoría de las compañías solo pueden operar un tren, siendo resultado de ello un desarrollo y un cambio de fase lento. Además, debe decirse que en el 18Mag las compañías ya empiezan con un tren y 50 Florines, y que los trenes tipo 2 son baratos (80 Florines, frente a otros juegos donde cuestan 100), lo que facilita un incremento rápido de los ingresos por dividendos.

Después de la selección inicial de compañías menores y una o dos acciones de las empresas prestadoras de servicios, comienza la primera fase de operaciones. En dicha fase las compañías menores pueden, como en todos los 18XX, poner losetas, estaciones, operar trenes y comprar trenes. El número de rondas de operaciones cambia durante la partida: primero es una ronda, luego dos y en el final de partida son 3 rondas de operaciones.

El mapa es grande, con pocos bloqueos y bien jalonado de costes de terreno: las tierras bañadas por el Danubio, el Drava y el el Tisza, y las zonas montañosas de los Cárpatos Occidentales, en el Norte del mapa, y los Cárpatos Meridionales y Orientales al Sur y Este del mapa, respectivamente. No obstante, los costes de terreno no están diseñados para ser prohibitivos y no frenan la rápida construcción de vías para la que está diseñado el juego. Las zonas offboard son: Viena (Bécs en Húngaro, la más interesante de todas) al Oeste, la región de Galicia al Noreste (la segunda más interesante) y las de menores ingresos, al Sur: Trieste, Belgrado y Estambul.

Sin duda, la loseta más rentable es la loseta de Budapest, que al principio comienza siendo dos ciudades (Buda y Pest) y luego según avanza el juego se convertirá en una loseta que une las dos ciudades y capaz de generar hasta 80 de ingresos en fase gris.

Una buena parte de la actividad viaria se va a concentrar en torno a Budapest pues no solo esta ciudad es interesante sino que relativamente cerca de ella hay  dos ciudades tipo OO, que son las que proporcionan una diferencia cada vez mayor en ingresos en cada fase con las ciudades normales. De hecho, si dividimos el mapa en cuatro cuadrantes, la zona en torno a Budapest y lo que sería gran parte del cuadrante inferior izquierdo, tenderá a congestionarse. Todas las compañías intentan al final establecer alguna conexión con Budapest o con alguna de las ciudades OO próximas a aquella.

La existencia de algunas zonas más interesantes que otras puede hacer pensar que, dado que las compañías empiezan en una parte concreta del mapa, empezar en Budapest o al lado es determinante. En mi opinión, nada más lejos de la realidad. El juego cuenta con mecanismos que compensan la relativa lejanía del centro. Por un lado, están las minas, en las zonas de montaña, más fácilmente accesibles para las compañías periféricas y que dan una subvención que permite a la compañía capitalizarse, lo que puede utilizar para construir una ruta más rápidamente o para tener mejores trenes antes que el resto. Por otro, muchas de estas compañías tienen “tokens de terreno”, es decir, que pueden evitar el pago de uno o dos costes de terreno. Además, están cerca de zonas offboard, cuyos ingresos pueden aumentarse haciendo uso de los servicios de una de las compañías de prestación de servicios a las compañías ferroviarias. Por último, alrededor de esta zona hay una buena densidad de pueblos lo que puede ser muy rentable según avanza la partida, dado que los pueblos se pueden actualizar, dando más ingresos (aunque las losetas que lo hacen son limitadas) y dado que hay una empresa prestadores de servicios que permite a las ferroviarias no contar los pueblos a efectos de calcular el rango de sus trenes pero sí sumarse sus ingresos, se pueden hacer rutas muy jugosas.

En defintiva, el resultado es un ritmo frenético de planificar rutas y crearlas que continúa casi hasta el final de la partida. A ello también ayuda la riqueza de losetas que permiten muchos tipos de cambios de dirección. A quien le guste este rasgo ingenieril, le gustará este aspecto del juego.



Reproducción del final de una partida on line a 4 jugadores. Como se puede ver, no hay casi huecos libres en el tablero.

Las compañías pueden usar hasta 3 estaciones desde el principio, siendo la primera gratuita y las otras pagando 40 y 80 florines respectivamente. Las losetas, como en todos los 18XX, bloquean, si bien en este, dada la variedad de losetas y la posibilidad de poner dos losetas en una ronda, hace al juego relativamente amigable frente a los bloqueos: en muchas ocasiones es posible buscar una buena ruta por otro lado. Pero no nos confiemos. Llevo ya siete partidas a este juego y las puntuaciones tienden a ser ajustadas. Un bloqueo mal previsto puede hacernos perder por muy poco.

Y vamos con uno de los aspectos más característicos del juego: los trenes. Aquí se produce uno de los puntos de ruptura más radicales con el sistema canónico de los 18XX. Hay trenes de 2, 3, 4 y 6 paradas y todos están disponibles desde el principio. No solo eso, sino que su compra no da lugar en ningún caso a obsolescencia (rust) de los más antiguos, es decir, no hay lo que se conoce como train rush. Este es precisamente uno de los aspectos del juego que más disgusta a los jugadores habituales de los 18XX: priva al juego de la tensión que produce la compra de trenes y tener que verse en la tesitura de tener que pagar un tren de tu bolsillo o caer en la bancarrota. Por contra, como ya decíamos antes, el juego lleva al jugador a: centrarse en la planificación y diseño de rutas y de compra de trenes, y en las sinergias con las empresas prestadoras de servicios. Porque aquí la decisión fundamental respecto a los trenes va a ser si comprar el más barato que me puedo permitir o ahorrar para uno mejor. Porque además, para comprar un tren tenemos que desechar uno de los que tenemos antes de que opere, con lo que perdemos sus ingresos durante una ronda.

El juego tiene algún mecanismo que proporciona riqueza a los trenes. Así, los jugadores pueden hacer uso de railcars (o ferrobuses), que permiten saltar los pueblos pero sumar los ingresos que estos generan, añadir un bonificador a las zonas offboard o acceder a las minas para obtener una subvención.

El cambio de fase es sencillo y rápido, se produce con la compra de los trenes 3, 4 y 6, y son de amarilla a verde, luego a marrón y por último a gris. Sin embargo, a diferencia de otros juegos, como en este juego están todos los trenes disponibles a la vez , los cambios de fase se producen cada vez que se compra un tren por primera vez de una pila de trenes. Es decir que, en teoría, si se compran trenes tipo 2 y el siguiente tipo de tren que alguien compra es el 4, se cambiaría a verde con un 4, en vez de con un 3, como ocurre en la mayoría de los juegos. Lo cierto es que en las partidas que he jugado, no he visto comprar trenes de una forma que no sea secuencial dado su coste creciente: primero los 2, luego los 3, después los 4 y finalmente los 6. El final de partida lo desencadena la entrada en fase gris. Esto, frente al modelo habitual de jugar hasta que se rompa la banca, permite impedir que se alargue innecesariamente.

Las compañías prestadoras de servicios también tienen su propia fase de operaciones. Operan por orden de precio y con los ingresos que obtienen (si tienen suficiente) ponen estación y el resto lo reparten en dividendos o reparten todo en dividendos a sus accionistas. Quien decide es el presidente (accionista mayoritario) y si no tienen presidente, siempre reparten todo. Las estaciones, además de bloquear como las de cualquier compañía ferroviaria (el presidente decide donde se ponen las estaciones), proporcionan un bonus adicional de 10 florines en la ciudad donde se sitúan. De este modo, aumentas el atractivo de regiones del mapa que no lo eran tanto y compensas rutas relativamente peores. O directamente, potencias rutas que ya eran buenas al tiempo que bloqueas (por supuesto, he visto poner estas estaciones en Budapest). Este es uno de los motivos por los que es bueno siempre tener como objetivo al menos una presidencia de una compañía prestadora de servicios. Otro motivo es aumentar la densidad de certificados, ya que los certificados de presidente solo ocupan un espacio.

La ronda de acciones no es claramente el corazón del juego, como sí ocurre con otros títulos, sobre todo, los sucesores del 1830. En ella compramos y vendemos acciones de las compañías prestadoras de servicios que proporcionan a las empresas: la posibilidad de colocar una loseta adicional, las estaciones, los costes de terreno, los railcars y los trenes. Es decir, que todos aquellos costes que hemos mencionado anteriormente en los que incurren las compañías ferroviarias no van a la banca, sino a estas compañías prestadoras de servicios en forma de ingresos. Por eso hemos de recordar siempre que el “chanchullo” principal de este juego consiste en que fluyan los ingresos de tus empresas menores a las prestadoras de servicios en las que tengas una participación mayoritaria para provocar varios saltos en el precio de la acción y obtener así ganancias de riqueza.

Estas compañías van ganando importancia a lo largo del juego porque aunque muchas veces los dividendos que ofrecen son pequeños en comparación con las compañías ferroviarias, los saltos múltiples que da el precio de la acción en la ronda de operaciones cuando reparten dividendos hacen que muy pronto supongan más del 50% del incremento de riqueza en un turno de operaciones. Y eso sin contar que cuando están completamente vendidas en la ronda de acciones, sube el precio. En definitiva, en una primera partida es muy posible que andemos perdidos y no le prestemos mucha atención pero pronto veremos que es un error: tomar buenas decisiones con la cartera de estas acciones puede ser definitivo para diferenciarte en la partida.


Reproducción del estado final del mercado en la misma partida a cuatro jugadores para la que hemos elaborado el mapa.

El mercado es de tipo lineal, y poco agresivo: una venta de acciones origina la caída de precio un paso hacia la izquierda, con independencia del número de acciones vendidas. Ahora bien, en función de lo que reparta la compañía de dividendos (el presidente decide si poner una estación o no, lo que se descuenta del disponible a repartir) la acción puede dar uno o más saltos. Los movimientos en el mercado de acciones tienen que ver mucho con los pronósticos que hagan los jugadores sobre cuáles van a ser las compañías que van a estar más en boga en las siguientes rondas de operaciones, con la posibilidad de hacerse con una presidencia barata y con la capacidad de generar sinergias con tus compañías. No hay grandes ajustes en las carteras. Tampoco es frecuente encasquetar presidencias. La única excepción a lo mejor son las compañías vendedoras de trenes pues en determinados momentos hacen ganar mucho dinero pero hay en rondas donde apenas se compran trenes. Esto tienta a algunos jugadores a salirse totalmente y encasquetártela a ti porque te obliga a quedarte con al menos dos certificados. Pero no parece una jugada que tampoco tenga gran impacto. Por lo demás, es un mercado muy similar a otros diseños de Lonny, como el del 18CZ, que en alguna entrevista se ha declarado así mismo poco amante de los mercados agresivos tipo 1830.

Nuevamente, no gustará a quienes les guste un mercado muy agresivo, con mucha manipulación, en el que haya que estar  pendiente de la prioridad y del orden de operación de las compañías. En lo que a las acciones se refiere, esto no va de eso. Va de ir leyendo el juego y detectar cuál es la cartera óptima. 
 
Seguro que alguien esté leyendo esto se estará preguntando ¿es este un buen 18XX de iniciación? Yo creo que no. El diseño del juego ha decidido prescindir de mecánicas que están presentes en prácticamente todos los juegos: la obsolescencia de los trenes, las compañías ferroviarias mayores con precio de mercado y acciones que se compran y se venden. Jugar a 18Mag permite aprender a poner vías y a jugar con los bloqueos de estaciones, así como comprender la estructura básica de un 18XX, pero más allá de eso… Hay otros títulos, como el 18MS, el 18Chesapeake, el 1846 o el 1889, que proporcionan mejor esa experiencia más próxima al estándar más habitual de los 18XX.

Entonces, ¿si no es un juego de iniciación siendo más asequible por ser menos agresivo que los 18XX tradicionales, cuál es su público objetivo? En primer lugar, los amantes de los 18XX que disfrutamos sobre todo poniendo vías y que les atraiga el juego de sinergias con las prestadoras de servicios. En segundo lugar, aunque no me parezca lo mejor para iniciar a los 18XX, sí que me parece un juego que puede resultar interesante para los amantes de los juegos de trenes, que disfrutan con el ejercicio de la optimización de redes.

Para finalizar, me gustaría hacer mención a la escalabilidad del juego. El número de compañías ferroviarias que poseen los jugadores varía con el número de jugadores, de modo que siempre va a haber 12 compañías en el tablero de las 13 posibles en una partida de 3 a 6 jugadores. A mayor número de jugadores, se reducen las posibilidades de buscar sinergias entre tus compañías que pueden estar potencialmente alejadas entre sí. En todo caso, con 12 compañías jugando, el tablero se va a llenar de losetas enseguida.

Por otro lado, el juego contiene una versión para dos jugadores y otra en solitario. En ambas el mapa es considerablemente más pequeño, no hay trenes de tipo 6 y hay menos compañías menores y menos compañías prestadoras de servicios. Destaca la ausencia de las minas, por ejemplo. Solo he echado una partida y funcionar, funciona. Al fin y al cabo, el mercado de acciones y sus interacciones, el tamaño del mapa y el número de compañías  son factores importantes de por qué los 18XX funcionan bien a números mayores de jugadores. Pero en este caso, con un mercado tan sencillo y un mapa escalado, no hay problema para disfrutar de una partida a dos jugadores.

No lo tengo claro, en cambio, de la versión en solitario. Se ha hecho un esfuerzo interesante, creando un automa (Istvan)  que tiene distintos niveles de dificultad y que opera conforme a unas cartas. Su mayor problema es su cabezonería a la hora de comprar determinadas acciones, que pueden no ser, ni de lejos, las más competitivas. Puede ocurrir que se pase casi toda la partida con una cartera mediocre, lo que reduce su competitividad.

En definitiva, 18Mag carece de algunos aspectos críticos para muchos jugadores de 18XX, pero sigue siendo un juego disfrutable si eres un fan de los aspectos más ingenieriles de estos juegos, si te apetece un 18XX de peso más ligero o quieres montar una partida con amantes de juegos de ferrocarriles, que puede que no hayan oído hablar de los 18XX.

Muchísimas gracias por vuestra lectura y espero que nos veamos en los andenes.
Muy buenas a todos, muy buenas queroscia.

Estaba releyendo los mensajes, y además de decirte (aunque creo que ya lo he dicho), que el juego tiene una pintaza enorme, quería trasladar algunas ideas que se me han ocurrido a vuelapluma, por si son de utilidad.

-Respecto al mercado de acciones. El planteamiento de que al vender más porcentaje se impacta más en el precio suena muy bien desde el punto de vista de la jugabilidad. Guarda algo de relación con el funcionamiento de los mercados financieros en realidad, en mi opinión. Un inversor deshaciéndose del 50% de una compañía manda una señal al mercado mucho más fuerte que un inversor que vende un 10%. Un inversor que vende el 50% está diciéndole al mercado "sálvese quien pueda". Pero además, en los mercados, las empresas pequeñas tienen una volatilidad mucho mayor en el precio, es decir, pegan unos bandazos mayores, tanto para arriba como para abajo, que las grandotas y sobre las que se espera un flujo de ingresos más o menos estable o "blue chips". En este sentido, dado que parece que las menores van a tener precio en el 18ESP, se podría jugar con distinguir en el impacto de los movimientos de precios en menores frente a mayores. Pero a lo mejor eso, si no se calibra, desincentiva a tener empresas mayores (que pegarían menos saltos en el precio), así que no sé si funcionaría. Yo lo cuento como idea.
-Respecto a los préstamos. Ya veo que la idea está desechada por el momento. Una pena, porque reconozco que me encanta ver empresas pobres que se tienen que endeudar y que terminan petando. Pero es verdad que introduce complejidades en el juego: tiene que haber, o nacionalizaciones, o insolvencia (reconozco que ambos mecanismos me gustan bastante), hace falta ver cómo se fija el tipo de interés (fijo o influido por los jugadores) y cómo se devuelve. Para esto, el mecanismo del 1861 es bastante sencillo, con tipo fijo y que solo te deja pedir si no tienes pasta para comprar tren y para poner loseta y un número muy limitado de préstamos, aunque, claro está, está pensado para que te apalanques y te aproveches de los préstamos y en última instancia, si sale mal, que se la coma la nacional. No sé... Molaría, aunque vosotros tenéis la visión de conjunto y veis si no se sobrecomplica el juego.
-Para la versión a dos jugadores (¡sí! ¡por favor! ¡que yo soy de los que los juego con mi señora!) podría enfocarse como el desarrollo del ferrocarril de vía estrecha y coger un mapa solo de la cornisa cantábrica. Y que coste que no soy del Norte (aunque le profeso mucho amor a esas tierras :)), pero parece una zona muy autocontenida y con una característica idiosincrática propia.
-Lo de tener varios tipos de trenes me parece un acierto de puta madre. Me pregunto cómo gestionaréis el tema de las minas. Parece que lo tenéis enfocado como una concesión que te permite usar los trenes de mercancías. Me recuerda a las concesiones del 1822 o del 1873 Harzbahn. Ambas te dan el derecho a comprar la presidencia de una compañía de ferrocarriles. Y ambas se subastan. En el caso del 18ESP parece que te darían el derecho a poder usar trenes de mercancías (o trenes de mercancías en unas determinadas localizaciones). Lo de que se comprasen mediante subasta mola. Porque pueden ser diferentes y tener distintas sinergias en función de quien las compre. Mientras no las vendas a una compañía de ferrocarril podrían darte ingresos como una privada. Y luego podrían ser un multiplicador de una o varias localizaciones (x2, x3 o lo que sea). En el Harzbahn funcionan más o menos así aunque hacen otras mil cosas.
-Disculpa si ya lo has dicho, pero me surgen otras curiosidades: ¿capitalización incremental, parcial con destino o total? ¿cuesta pasta poner loseta aunque no haya costes de terreno?
-Creo recordar que habéis recogido el sistema del 44 de que los trenes primero se hacen H y luego se cascan. Me parece una idea cojonuda. te fuerza a pensar rutas en un montón de OR y no ir en piloto automático.

Bueno, y esto es lo que se me ocurre por ahora. Por si es de utilidad. Disculpa si planteo cosas que ya has dicho.
Pintaza que tiene el proyecto, Enrique. Y además, para los que no conozcáis a Lonny, es uno de los autores con ideas más innovadoras en los 18XX.

Ya de paso aprovecho para preguntarte qué peso está teniendo el cromo en el proyecto. ¿Qué papel está jugando la historia del ferrocarril en España en el diseño? Pienso que los 18XX son tan complejos que muchas veces lo más probable es que se opte por centrarse en el diseño de la mecánica con algunos tintes de tema, salvo alguna excepción, como el 1862, en el que el peso temático es más grande.

Mucha suerte y que salga adelante.


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Hola. Menciono este hilo en el último programa de Jugando con Da2. No iba sobre 18XX, sino sobre juegos on line, pero aún así me parece una excelente introducción a los 18XX que incluye también su vertiente online.

http://da2-clubjuegosdemesa.com/jcda2-45-metadona-ludica-juego-online-y-digital-nemesis-too-many-bones-undertow/

Muchas gracias
Hola a todos:

Después de experimentar un poco con la aplicación Rails, que sirve para jugar varios 18XX mediante el sistema de Play by E-Mail, me gustaría montar una partida, preferiblemente a 1830, cuyas reglas conozco, pero estoy abierto a otros 18XX que soporte la aplicación.

La aplicación es de descarga gratuita en http://rails.sourceforge.net/.
 
La idea es que se abre una carpeta en dropbox a la que todos tenemos permiso de edición y cada  uno va grabando su turno y anunciando al resto lo que ha hecho y a quien le toca. Se trata de copiar y pegar un mensaje que la apliación Rails da.

Podemos hacerlo vía foro o por correo, como prefiráis.

Respecto a la frecuencia, yo diría que al menos un movimiento al día, si algún día podemos más, pues mejor. La subasta inicial podemos resolverla rápidamente, vía whatsupp, skype o lo que sea para que empecemos la parte más chichosa del juego cuanto antes.

Los novatos son más que bienvenidos. Yo, de hecho, he jugado sólo un par de partidas al 1830 (lo que pasa es que me tengo muy empolladas las reglas y he leído bastante) y me sigo considerando un novato.

¡Animaos!

Alberto.

en: 25 de Marzo de 2016, 22:44:31 10 KIOSKO / Reseñas escritas / Re:It's Mine (Reseña)

Anda! Yo acabando una partida ahora mismo. A mí me parece muy original, con ilustraciones muy chulas y lo de los simbolitos... Yo llevo mi segunda partida y ya no tengo que mirar las reglas. La mayoría me parecen intuitivos.

Muchas gracias por la reseña

en: 25 de Enero de 2016, 21:25:00 11 KIOSKO / Podcasts / Re:[Un Wargame Demasiado Lejano] Episodio 5

Yo también espero que el proyecto siga adelante, la verdad. Me parece que el podcast tiene muchísima calidad. Yo, que estoy empezando a enterarme de este mundillo de los wargames, lo estoy disfrutando mucho.
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