Pues mi corto reinado ha llegado a su fin, os habéis librado de soportarme unos días más! 
Ahora llega el momento de que otro ocupe mi lugar, esa persona es Segoviano, un gran jugador de TtA con el que disfruto jugando en la BGO, un buen tipo que seguro que tiene un montón de cosas que contarnos, os dejo con su presentación:

Saludos a todos los besekeros!

Ha sido toda una una sorpresa que Kuni me proponga como primer baronet de 2014, y espero estar a la altura

Me llamo David, tengo 36 años y vivo en un pueblo cercano a mi ciudad natal, Segovia, junto con mi chica y cuatro gatos. Trabajo como consultor y desarrollador en tecnologías web desde hace más de 10 años, actualmente como freelance autónomo.

Mis inicios lúdicos pasaron por varios estadíos que muchos de mi quinta reconocerán. Siempre me han gustado los juegos de mesa, recuerdo de pequeño con mucho cariño partidas con mis primos al Trivionary, que era una mezcla de pictionary y mímica, las partidas con mi hermana a Misterios de Pekín o al Hotel o las partidas de pocha con diversos grupos de amigos.

La historia empieza a ponerse interesante a los 13-14 años, cuando en mi pueblo, donde pasaba fines de semana y vacaciones de verano, conocí a un amigo que vivía en Madrid y su padre era militar. Con él empecé a conocer NACs como Rommel contra Montgomery, Vietnam, La Fuga de Colditz, La Segunda Guerra Mundial o La Guerra Civil Española, entre otro muchos, o juegos también emblemáticos como HeroQuest, Ambush, Cry Havoc o World in Flames. Eran buenas épocas con muuuuucho tiempo libre donde podíamos estar días enteros simplemente desplegando el World in Flames.

Un par de años más tarde, me apunté a un club aquí en Segovia que se llamaba Vae Victis y descubrí el rol, jugué a D&D, Stormbringer, La llamada de Cthulhu, Star Wars entre otros, pero recuerdo con muchísimo cariño el Paranoia, no me he divertido jamás tanto con un juego de rol que con Paranoia. El rol me ayudó a juntar lo que sería mi pandilla en mi pueblo en los próximos años, con muchos ya perdí el contacto pero mi colegaza Jose sigue estando ahí, ahora forma parte de mis correrías lúdicas.

El siguiente paso, ya en la Universidad, estaba cantado: Magic. Duré apenas un par de años en Magic, recuerdo mucho las tardes que bajaba a jugar a una tienda de Segovia, montábamos partidas a 4 por parejas, y llegué a tener un mazo muy competitivo en esa manera de juego basado en el Elemental Augury, que me permitía robar cartas de los mazos de otros jugadores y devolverlas en el orden en el que yo quería. Cuando empecé a conseguir también Ruedas de molino, empezaron a odiarme...

A partir de aquí, toda mi experiencia lúdica se difumina entre noche y alcohol primero y entre responsabilidades laborales después, pero siempre me gustaba echar un Monopoly, un Trivial o una pocha cuando era posible. Hasta que llegó un día de Febrero de 2011...

Ese día bendito, quedamos en mi casa mi chica y yo con dos amigos de la pandilla del pueblo de toda la vida (saludos a Emilio y Mª Cruz) y trajeron un juego de mesa: Un Mundo Sin Fin. Explicaron el juego, lo jugamos y después ya nada sería lo mismo, me encantó. Unas cuantas búsquedas en Google después me llevaron a la BSK, a Jugando con Ketty (impresionante su trabajo) y a varias tiendas online, lo cual terminó con Un Mundo Sin Fin, Carcassonne, Caylus Magna Carta y San Petersburgo viniéndose para casa.

De ese momento y hasta ahora, han pasado muchas horas de juego y muchas más horas de consulta de labsk, lectura de blogs, a la búsqueda de la oferta, escucha de podcast y visionado de vídeos, además de alguna que otra visita a jornadas.

Mis gustos lúdicos se inclinan sobre todo por los eurogames, siendo las mecánicas que más me gustan la gestión de recursos y colocación de trabajadores, aunque también me gustan subastas y mayorías. Tengo especial debilidad por los juegos cooperativos y no me gustan los juegos puramente de puteo, porque pueden fomentar el mal rollo y para mí pasárselo bien y divertirse en un juego es lo primordial. Tampoco me gustan los juegos de traidor, porque soy malísimo mintiendo Actualmente y a raiz de la publicación de Senderos de Gloria, estoy volviendo a mis orígenes al interesarme bastante por los wargames.

También gusto de los juegos familiares, ya que me considero evangelizador lúdico y ese tipo de juegos son mis herramientas para conseguir convertir cada vez a más gente a la afición. Me encanta ver como alguien que nunca ha pasado de Trivial o Monopoly se lo pasa bien y disfruta con un Catán o un Carcassonne.

Y bueno, se abre el turno de preguntas! Ah, antes las afirmaciones, las tres tienen un punto de verdad, pero sólo dos de ellas son completamente verdaderas:

1.- El momento de AP más surrealista que he visto fue no hace mucho, con la novia de uno de mis amigos, estuvo más de media hora para hacer su jugada, con viaje al baño incluido. Éramos cinco personas esperando su jugada, fue horroroso. Por cierto, el juego era La Vuelta al Mundo en 80 días.

2.- Otro de mis hobbies es coleccionar monedas, me encanta viajar y siempre que visito un país, me preocupo de obtener al menos un ejemplar de cada moneda de curso legal. Con los países de la zona euro no lo hago, es muy aburrido.

3.- En la Universidad había un grupo de jugadores de Magic, y el primer día que me junté con ellos (yo era un pipiolo y no tenía ni idea del valor de las cartas) me tangaron en un cambio, me dieron un Desert Twister por mi Fuego Fatuo. Uno de los miembros del grupo se debió apiadar de mí y me regaló nada más y nada menos que un Demonic Tutor.

Enhorabuena David! quería haberte preguntado abusando del poder que me concede ser el Baronet en declive, pero no tengo tiempo, mi hija necesita dormir, pero en cuanto pueda, no te libraras y mis preguntas llegaran!  

Ah! y la que me suena a mentira es la 3.  ¿Un Demonic Tutor? no se... raro raro... pero podría ser! pero me la juego con esa