DOOM - El Juego de Tablero - 14/06/2008 (sí, no vimos el partido
)
Nos reunimos elqueaprende, laquenseña, Keroak y un servidor en casa de Keroak (gracias por la invitación) para estrenarnos con el Doom. Ninguno habíamos jugado antes.
Como introducción, decir que, si bien no nos sorprendió en ningún aspecto destacable (a parte de lo que molan los monstruos
), en general nos gustó a todos y pasamos una buena tarde. Y fue la tarde entera, porque la partida se nos fue casi a las 4 horas (incluyendo explicación).
En DOOM, uno de los jugadores juega con los invasores y los demás llevan (cada uno) a un duro marine que lucha por escapar de la base invadida. Yo tomé el papel de los invasores (me había empollado las reglas y el escenario, cosa importante para el que va a llevar al malo).
Repartimos las fichas a los marines. Siendo tres: 8 de vida, 2 de munición, 2 de armadura y 2 cartas de habilidad, que fueron éstas:
- Keroak:
Operaciones Especiales (+2 de daño con el dado rojo) y
Alerta (tras avanzar, queda siempre en "alerta", y si interrumpe dispara "apuntando").
- Elqueaprente:
Táctico (tras avanzar, puede hacer una preparación, a sí mismo o a otro marine) y
Médico (puede curar 1 herida con una preparación, a sí mismo o a otro marine adyacente).
- Laquenseña: Otra de
Operaciones Especiales, y además
Instinto Asesino (cuando mata a un invasor, puede mover y atacar de nuevo gratis, una vez por turno). He de decir que esta combinación junto con la motosierra me dio no pocos disgustos
Yo por mi parte cogí mis cartas de invasor y comenzamos a jugar el primer escenario de la campaña que viene con el juego.
Comenzaron repartiéndose las armas que aparecen en la primera habitación. La escopeta para Keroak y la motosierra para laquenseña (ambas usan el dado rojo). La metralleta fue para elqueaprende.
Los primeros turnos fueron un paseo para los marines: ellos avanzaban y mis patéticas hordas invasoras morían, sin excepción
, lo que hizo que casi la mitad de la partida nos diera la impresión de que el juego era muy fácil para los marines (cosa que nos sorprendió, claro). Consiguieron la llave roja sin problemas gracias a una granada bien colocada y siguieron como si tal cosa. Lo mismo con la clave secreta del "prototipo".
Yo ya pensaba que no valía para esto. Lo bueno es que se estaban confiando y eso les hizo perder la cautela (pronto iban a pagar cara su arrogancia
): empezaron por abrir una puerta todos pegaditos a ella y sin prepararse en absoluto. Por primera vez les zumbé en condiciones. Laquenseña aprendió a temer a mis perritos demonio, cuya habilidad especial les permite atacar gratis a cualquiera que se les acerque (lo que mantenía a raya la temible motosierra de la marine).
Pero el momento de inflexión de la partida se produjo realmente en la habitación del prototipo. Laquenseña entró a trapo con su motosierra en medio de las arañas y el mancubus que salen en la habitación, mientras elqueaprende y Keroak esperaban fuera "preparados". Entonces usé una carta de evento que llevaba largo rato esperando usar: "¡Encerrado!"; la puerta de la habitación se cerró con laquenseña dentro y quedó bloquedada durante un turno. ESTA ES LA MIA, pensé, pero los dados tenían otros planes: llegó el momento "X" (por no decir ridículo) de la partida: uno tras otro, mis monstruos fallaban su ataque contra laquenseña, sacando tres X consecutivas en los dados (si no me equivoco, eso sólo debería suceder una de cada 216 veces en un universo equilibrado). Mi gran oportunidad echada por tierra.
Tras semejante cagada, Keroak y elqueaprende se piraron diciendo "bueno, ya se encarga ella ¿no?" (¿he dicho que iban muy confiados y arrogantes?
) pero no se encargó (de hecho murió, gracias a una trampa activada por elqueaprende al recoger una ficha de munición), con lo que el resultado no fue tan malo para mí.
Tras esto, perdieron mucho tiempo volviendo a coger el prototipo. Mis cartas de engendramiento ya salían a un ritmo regular y se sucedieron varios "frags" en pocos turnos.
Cuando abrieron la última puerta, sólo faltaba un "frag" para que el invasor ganara, y faltaban sólo un par de turnos para agotar el mazo de cartas (lo que da un "frag" más al invasor), así que tuvieron que entrar a la desesperada en la última habitación atestada de bicharracos. El final llegó rápido, con el marine de laqueunseña lanzado por los aires por un caballero infernal.
Y así terminó nuestro primer acercamiento al Doom. Personalmente espero poder repetir, pues a pesar de ser una partida un tanto rara (muy fácil para ellos al principio, y muy facil para mí al final), disfruté de la experiencia.
Sólo espero que laquenseña no tuviera pesadillas con perros infernales saliendo de entre las tinieblas
leche, vaya rollo que he soltado