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Sesión de Juego de Serenissima. Un "Euro-Wargame"
« en: 25 de Diciembre de 2009, 14:39:48 »
Es Navidad, que mejor época del año para hacerse regalos entre los amigos y, claro, yo y otros dos amigos decidimos jugar al Serenísima para ofrecernos recíprocamente Madera, Hierro, Vino, Telas, Especias, Piedras Preciosas, Oro y como no, una buena cantidad de mamporros  ;)

Con tal espíritu navideño decidimos empezar la primera partida a esta, para nosotros, novedosa promesa de buen juego de comercio en el mediterráneo y, para ello, sorteamos las naciones: Venecia para Cesar, Génova para mi y Valencia para Jorge. ¡Que bien!, no hay nada como estar en medio de dos “ratas de mar bebedoras de grog”


Tras un pobre inicio táctico de mi parte en el que jugando el último decido de forma totalmente inverosimil que el puerto de mi colega valenciano debía de guardar en sus almacenes una de mis piedras “made in Genova”, (Nota: pensaba obtener con ello el bono de 1000 puntos por vender en el puerto madre de un rival), sin mirar bien el mapa y reparar en que mi queridísimo vecino de valencia ya había conquistado el famoso puerto de piedra de Barcelona (Nota: lo que impedía que obtuviese dicho bono), me doy cuenta, tarde, no solo de que la mercantil maniobra no fue especialmente provechosa ni acertada, y lo que es peor, mi queridísimo vecino valenciano :-p, transportando madera a Barcelona y con mi gentil piedra en Valencia se construyó en el primer turno la gran flota española del mediterráneo para estupor e incredulidad de mi pueblo genovés, que no sabían explicarse como y quien había elegido a “tan gran estratega” para dirigirles en el escenario de batalla.


Pasado el mal trago inicial doy tumbos alrededor de las ciudades próximas a mi capital, entre otras conquisto Cerdeña, mientras el valenciano se extiende por todo el norte de África y el veneciano toma posiciones al sur de la península del peloponeso, cuando mi amadísimo amigo valenciano, con superior flota, decide saquear uno de mis mercantes genoveses en el mismísimo puerto de Génova, ¡vive Dios, que afrenta¡, dándome un más que justificado “casus belli” con el que comienza I guerra Castellano-Genovesa.

Tras unas escaramuzas iniciales y aprovechando unos buenos vientos (Nota: pujé para ser último en mover en el turno 4) organice en dos galeras a un puñado de valientes con el objeto de devolver al pueblo genovés la dignidad maltrecha y, reparando el valenciano en mis preparativos navales, cuya ejecución no pareció ver con muy buenos ojos, decide concentrar el grueso de su flota (tres galeras) en algún punto de las costas de la isla de Cerdeña, en una gran maniobra táctica que buscaba la defensa de la intimidación por numero, y que, no obstante, no funcionó contra el selecto grupo de bravos y aguerridos genoveses que, tras despedirse de sus familias, zarparon rumbo a la gloria.

La batalla fue épica. No hubo supervivientes por ninguno de los dos bandos. :o


La noticia corrió como pólvora que quema hasta Venecia, quien lejos de plantearse cuestiones de ayuda humanitaria (esas son cosas de otros tiempos futuros y por venir) se aprovecha de la situación para tender su dominio y redes comerciales por todo el mediterráneo oriental (Creta, Turquía y Acra).

La firma del armisticio castellano-genovés era la única salida para reanudar los intercambios comerciales en el mediterráneo occidental, recuperar unas economías muy perjudicadas por la guerra e intentar contrarrestar el voraz e insaciable avance del veneciano que amenazaba con emular históricas y “pacíficas migraciones” ;) que en otros tiempos hicieron de oriente a occidente, pueblos como los Persas o los Hunos.

La partida no tuvo mucha más historia, Venecia se convirtió en algo muy grande, muy gordo, muy imparable y acabó ganando con una estrategia de hegemonía mercantil en el mediterráneo oriental, sin necesidad de intervenir en conflicto alguno y con un cierre total de sus puertos.

Mis impresiones: Gran juego de guerra y comercio, gracias a Gixmo por “recomendármelo indirectamente” con su puntuación ;), que posiblemente es mejor jugar a 4 jugadores, toda vez que a 3, el conflicto entre dos de ellos puede desequilibrar un tanto la partida a favor del tercero y que merece muy mucho la pena si te gustan los EURO-WARGAMES.
Todo lleva más tiempo que todo el tiempo que tienes disponible.