logo

Etiquetas: reseña 

Autor Tema:  (Leído 3150 veces)

Raenaris

CATAN HISTORIES: STRUGGLE FOR ROME (Reseña)
« en: 13 de Marzo de 2007, 14:52:39 »


CATAN HISTORIES: STRUGGLE FOR ROME:

Buenas. Hace poquito que me compré este juego movido por el ansia de tener algún Catan en mi ludoteca. Nunca he encontrado el momento, por diversas razones, de adquirir el original. Y no porque no me gustara, ni mucho menos. Así que al ver este juego, decidí que ya era hora de tener uno, aunque no fuera el de siempre.  

Catan Histories para los no entendidos, no es más que una vuelta de tuerca más del archiconocido Colonos de Catán. Se trata de una serie de juegos con reglas similares al original, pero ambientados en diferentes épocas de la historia. Vamos, con temática.

En el caso de Struggle for Rome, el periodo histórico es obvio. Movidos por el miedo al empuje de los bárbaros de las estepas del centro de Asia, diversas tribus bárbaras emigran al oeste de Europa, hacia los dominios de una maltrecha Roma en los últimos compases de su hegemonía.

De modo que cada jugador toma el control de 2 tribus bárbaras (si, he dicho bien, 2, ya lo explicaré luego) que se lanzan a la conquista de los pobres romanos.

Y ahora destripemos el juego.

COMPONENTES:

Hasta ahora no había tenido ningún juego de Mayfair Games, y la verdad, al menos en este me han encantado en general todos los componentes del juego. No es que sea un alarde de fichas y muñecos, en la línea de FFG, pero tener tiene bastantes.

La caja es muy bonita, de un tamaño parecido a la del Arkham Horror o al Ticket to Ride. No pesa excesivamente, lo que se agradece en ocasiones, y por dentro es bastante funcional. Posee diversos compartimentos para los muñecos, marcadores, cartas, dados, etc, etc... y en su conjunto, una vez sacado todo de la bolsa "comunal", cabe perfectamente sin agobios.

El tablero a mi me encanta. Representa la Europa conquistada por los romanos, salvo Constantinopla y aledaños. A su vez, el mapa europeo esta dividida en 5 regiones (Italia Superior, Italia Inferior, Las Galias, Germania e Hispania). Y todo esto dividido en los famosos hexágonos. Representan diferentes tipos de terreno: montañas, granjas, praderas y bosques. Además, situados en los vértices de muchos de ellos, encontramos ciudades romanas que esperan ser asaltadas por nuestras tropas.  

   



En cuanto al resto, unos dados de madera normalitos, el muñeco de legionario romano que hará las veces del ladrón del Catán, los muñecos de las tribus bárbaras, que son de plástico, pequeños y funcionales, marcadores de ciudades y 3 cosas más que me dejaba para el final.



Por un lado la baraja de cartas: son del tamaño estándar alemán, o sea, pequeñitas. Se dividen en cartas de recursos, que hay 4 (rocas, grano, caballos y mulas), las cartas de objetivos, que también las hay de 3 tipos, y las de desarrollo, que son como las del Catán que se podían comprar. Por otro lado están unos cartoncillos de ayuda para los jugadores donde vienen muy bien explicadas las fases del juego. Y finalmente están las monedas del juego, 5º recurso, y que sirve casi, casi como comodín.





Me he dejado estos 3 componentes para el final porque son los que más llaman la atención, para bien o para mal, tablero aparte :D . En el caso de las cartas y los cartones de ayuda, me ha parecido que son demasiado finos. Esto a priori no me parece un inconveniente, pero acostumbrado a otros gramajes como los de las cartas de FFG, o las de Age of Wonders, pues la verdad es que cantan un poco, más todavía en los cartoncillos de ayuda, que son unas tiras alargadas y estrechas que si se manejan con poco cuidado pueden doblarse con bastante facilidad. Sin embargo, en le caso de las monedas, son soberbias. Están hechas de plástico y tratan de emular a los denarios romanos de la época, con sus cantos deformes y desgastados. Encima, llevan grabadas en sus caras el busto del emperador Diocleciano y otras parafernalias de la época. Lo dicho, lo más friki del juego con diferencia XDDD.



SISTEMA DE JUEGO:

Bueno, el juego, como ya he dicho antes trata de conquistar las regiones en las que se dividía el Imperio romano. Para ello contamos con 2 muñecos que representan a 2 tribus bárbaras, una compuesta por jinetes de caballo, y la otra de gente a pie, las cuales situaremos en la región más al nordeste del mapa, por ser nuestro pto, de partida. Dichos muñecos los iremos moviendo por el tablero siguiendo los bordes de los hexágonos, parándonos únicamente en los vértices, y conquistando las ciudades que hay repartidas por el mapa. Estas ciudades conquistadas, además de las cartas de objetivos, otorgan ptos. de victoria, de manera que el primero que llegue a 10 se hace con la partida.

Tenemos 4 fases de juego, bien diferenciadas.

La primera es una fase de recursos. En ella el jugador de inicio tira 4 veces los dados. El resultado de cada tirada se marca en el tablero y se recogen los recursos de la misma manera que en el Catán, vamos, de aquellos hexágonos en cuyos vértices estén situados nuestros 2 muñecos. En el caso de sacar un 7, no se pillan recursos por dicho número, sino que el jugador que tira los dados, mueve el legionario romano a un hexágono a su elección, robando una carta de recurso, u oro si no se tienen cartas, de un jugador con muñeco en un vértice de ese hexágono, y además, prohíbe la obtención de recursos de esa casilla.

La segunda fase es la fase de compra y comercio. Empezando por el jugador de inicio, se pueden comerciar cantidades a pactar de cualquiera de los 5 recursos del juego. Además, se pueden canjear estos recursos por: caravanas, miembros de tribu o cartas de desarrollo.

Tanto las caravanas como los miembros de tribu, son muñecos que tenemos en nuestra reserva, y que se van añadiendo a un espacio dedicado a cada una de nuestras 2 tribus, y que esta en el borde del tablero. Las caravanas sirven para poder conquistar ciudades y para ganar más dinero cuando se asedia. En cuanto a los seguidores, son indispensables para ir tomando las ciudades, ya que representan la fuerza de nuestras tribus.

Las cartas de desarrollo, al igual que el Colonos, tienen efectos dispares, pero la gran mayoría son de un tipo llamado Diplomático, que es como los soldados del Catán, vamos, que sirve para ir moviendo al legionario y putear a los demás jugadores.



La 3ª y 4ª fase son idénticas en cuanto a opciones, salvo por el hecho de que la primera se ejecuta con la tribu de jinetes y la segunda con la de gente a pie. En dichas fases es cuando podemos mover a nuestras tribus para ir expandiéndonos y formar nuestro reino.

Aquí es cuando explico la diferencia entre asediar una ciudad y conquistarla. Las ciudades del mapa, tienen todas ellas un marcador del color de la región a la que pertenecen, el cual se coloca al azar y con la recompensa boca abajo. Además, dibujado en el tablero, cada urbe tiene entre 2 y 5 cuadrados que representan murallas. Pues bien, tanto para asediar como para conquistar, lo primero que hay que cumplir, es haber llevado nuestro muñeco (bien el jinete o el infante) a un vértice anexo a la ciudad, y tener tantos seguidores en el espacio de la tribu en cuestión como murallas tenga la ciudad. Si se cumplen estos 2 requisitos, podremos entonces elegir entre el asedio o la conquista.

El asedio consiste única y exclusivamente en destapar el marcador, y recoger su recompensa, a parte de ganar una moneda de oro por cada caravana que posea la tribu asediante. Además, por hacerlo, hay algunos marcadores que obligan a quitarnos un seguidor de una de nuestras tribus (no necesariamente de la que ha asediado). A cambio, colocaremos dicho marcador en el espacio de nuestra tribu en el borde del tablero dedicado a los marcadores.



¿Para qué sirve esto?, pues porque para poder conquistar, que es lo que da los ptos. de victoria, necesitamos haber conseguido al menos 3 marcadores de diferente color (o sea, de diferentes regiones) con la tribu que quiera hacer la conquista. Esto significa que en un momento dado, podemos iniciar la conquista con una tribu, y en otro momento, hacerlo con la otra.

Cuando ya cumplimos el requisito, podemos hacer nuestra primera conquista. La diferencia con el asedio es que quitamos el marcador y lo descartamos, sin coger su recompensa, y en su lugar ponemos nuestro muñeco de tribu junto con una caravana de la reserva de dicha tribu. Esto significa que a partir de ese momento no podremos desplazarnos con dicho muñeco para llegar a otros recursos, y solo pillaremos recursos de aquellos hexágonos que estén anexos a nuestro asentamiento.

Una vez realizada la primera conquista, con esa tribu ya solo podremos expandir nuestro reino, lo cual se hace eligiendo en una fase posterior otra ciudad anexa a la nuestra, y, si cumplimos los requisitos de fuerza, y poseemos otra caravana en la reserva de la tribu, quitamos el marcador (si aun queda) y colocamos una caravana y otro muñeco de los seguidores.



Queda por comentar una acción más que es fundamental, el movimiento. En la fase de cada tribu, podemos mover el muñeco hasta cualquier vértice que nos de la gana. Para ello viajamos a través de los lados de los hexágonos (si, por donde se ponían los caminos del Colonos) o a través de unas rutas marítimas que unen algunas costas con otras. Eso si, en una gran mayoría de esas rutas marítimas y lados hay dibujadas unas flechas. Significan que durante nuestro movimiento, deberemos de pagar, bien un oro por el uso de un barco, o bien un grano o 3 oros si vamos por tierra por cada flecha tras la primera que crucemos. Así se controla que no haya movimientos que se crucen toda Europa de una tacada, a no ser que se este forrado, lo cual no suele ocurrir.

CONCLUSION / VALORACION:

El juego tiene 2 momentos. El primero es al principio donde todo el mundo va a la caza de los marcadores más fáciles, para poder iniciar la formación del reino cuanto antes, y por las recompensas que otorgan dichos marcadores. Además, la lucha por situarse en los vértices con mayor probabilidad de obtener recursos es encarnizada, agravada por el hecho de que los bosques en el juego no dan nada, de modo que hay zonas más bien pobres, como los desiertos del Colonos.

Una vez la gente esta en disposición de iniciar las conquistas, que suele ser bastante parejo, comienza otro tipo de lucha, que es tratar de expandirte cerrando a los demás, consiguiendo para ti aquellas ciudades mejor situadas por la cercanía de más recursos.

El juego dura unos 90 min, según la caja. En nuestra primera partida fueron 2 horas y media , con explicación incluida, pero la sensación es que es un juego perfectamente jugable en 2 horas o menos.

Con respecto al Colonos de Catán, se diferencia principalmente en la temática, en que se tira 4 veces por los recursos (repitiendo las tiradas que ya hubieran salido, y cogiendo máximo una carta de recurso por hexágono), en el movimiento de expansión, pues en el Catán directamente empiezas expandiéndote mientras que aquí puedes moverte a tu antojo hasta que creas oportuno iniciar tu conquista, y poco más.

Para mi gusto hay más factor de puteo entre jugadores, debido principalmente a la movilidad de los marcadores de tribu al comienzo, y porque la gente trata de rapiñar los marcadores de ciudad lo más rápido posible.

Salvo cuando se empieza a formar el reino, los recursos son más bien escasos, y es fácil que te quedes un par de turnos sin poder hacer nada por culpa de un par de tiradas malas o un legionario movido a mala leche por otro, pero por fortuna si se pasa en las fases 3 y 4, se obtienen 2 monedas en cada una, y estas siempre se pueden intercambiar una vez por fase de comercio/construcción por un recurso a razón de 3:1.

En líneas generales me ha gustado mucho, y lo encuentro más interesante que el Colonos de Catán, aunque seguramente por la temática y el tener que manejar 2 tribus con posibilidades de expansión cada una por su cuenta puede parecer a priori algo más complicado que el juego original para los no iniciados. Eso si, a los que les guste los juegos de expansión y gestión de recursos, el juego les encantará, ya que por su duración, componentes y variedad de opciones es muy recomendable como juego de una tarde.

Completo, bonito, y no muy complicado. Con unas reglas que se explican en 10 minutos, menos si la gente sabe jugar al Catán básico, y bastante rejugable.

En fin, espero que os guste esta mi segunda reseña. Ahora estoy con la traducción de las reglas al castellano, porque en la BGG na de na. Como no dispongo de excesivo tiempo, la maquetación la he obviado y me estoy limitando a traducir a formato Word. Lo digo por si alguien interesado quiere que le pase los textos y hacerla el.  

Por lo demás añadir que en la BGG se puede bajar una expansión oficial, la cual simplemente consta de 3 cartas imprimibles para usar como 4º tipo de objetivo.

Un saludo!!!

Michael.
« Última modificación: 22 de Diciembre de 2009, 22:01:12 por Membrillo »
Uno mas de por aqui, oiga.

DReaper

RE: RESEñA CATAN HISTORIES: STRUGGLE FOR ROME
« Respuesta #1 en: 13 de Marzo de 2007, 15:07:25 »
Estupenda reseña: me gusta mucho el Catan y este pinta bastante bien.

Mil gracias por compartirla. :-]

Rueco

RE: RESEñA CATAN HISTORIES: STRUGGLE FOR ROME
« Respuesta #2 en: 13 de Marzo de 2007, 16:02:48 »
Gracias por la reseña Raenaris, coincide que hace pocos días estuve buscando información de este juego por la red  ;D

Pero ¿qué objetivo final tiene el juego? Es decir ¿quien gana la partida? ¿También el primero en llegar a x puntos?

Saludos.

Raenaris

RE: RESEñA CATAN HISTORIES: STRUGGLE FOR ROME
« Respuesta #3 en: 13 de Marzo de 2007, 20:40:06 »
Efectivamente, aquel que llega a conseguir 10 ptos., igual que en el Catán, gana la partida. Lo que pasa es que en el Colonos los ptos. los van dando las casas que se construyen, y a parte, si logras algunos objetivos como ser el que tiene el camino más largo, el que más soldados ha jugado, etc...

Aqui los ptos. los otorgan las ciudades que conquistas (no las asediadas), y luego las cartas de objetivos, que hay 3 tipos más el 4º descargable de internet, que se consiguen nada mas cumplirlos. Estos otorgan 2 ptos., por lo que es casi vital hacerse con alguno para ganar la partida. Son:

a) El primero en jugar 3 cartas de Diplomático
b) Conseguir un marcador de ciudad de cada una de las 5 regiones
c) Conquistar 4 ciudades con cada tribu

De la primera hay solo una carta, siendo el primero en conseguir el objetivo el que se la queda, y a priori, es la más fácil de obtener. De las otras 2 hay varias copias, ya que cualquiera que consiga los objetivos puede cogerlas.
Uno mas de por aqui, oiga.

Arracataflán

RE: RESEñA CATAN HISTORIES: STRUGGLE FOR ROME
« Respuesta #4 en: 13 de Marzo de 2007, 20:51:11 »
Me ha venido muy bien esta reseña porque tenía curiosidad por saber las diferencias reales entre Catán y sus secuelas y así sé de una al menos. De esta forma no me importa no tenerla por que, aunque parece interesante, me basta con lo que tengo, no difiere tanto como para querer tener dos.
Absolutamente todo lo que yo pongo implica un fondo de buen rollito inconmensurable. (Genmaes)