Bob Kenzie, el conocido preparador físico y entrenador personal de los famosos, ha sido encontrado muerto en extrañas circunstancias en uno de los ascensores de la Residencia Devon.
Buen conocedor de todas las técnicas de entrenamiento y asesor deportivo de altos directivos del mundo empresarial en grandes megacorporaciones. A lo largo de los últimos años había destacado en la elite empresarial, por introducir novedosas técnicas y aparatos más avanzados para el entrenamiento y salud personal, complementando así su labor como consultor deportivo y de estilo de vida.
Al cierre de este tabloide, se desconoce las causas reales de su muerte, pero testigos presenciales afirman haberse encontrado con la desagradable visión de un cadáver hinchado y deformado, tumbado en posición fetal en el suelo del ascensor, al que ni siquiera pudieron reconocer, y del que más tarde se supo su identidad, gracias en gran parte a las pertenencias que llevaba encima en el momento de su fallecimiento.
Nota: Enigma número 2 del playset Eugenesia para jugar en un futuro distópico en el Club de los Martes.