Allí estaba yo, en el ahora ya famoso BdC de Torrelavega, a las nueve y poco, tal y como había anunciado previamente en el hilo correspondiente del foro. Tomo posesión de la mesa, despliego el tablero, desembolso y coloco componentes, otro repaso (¡y van!...) a las reglas...
¡Swooshhh! la brisa marina arrastra a toda velocidad unos extraños arbustos esféricos por la superficie del calmo mar
(¡cosas veredes, amigo Sancho!).
Cri, cri... ¿¡Quién a traido grillos a bordo!?
Finalmente, sobre las diez y pico, cuanto ya tengo varias generaciones de arácnidos viviendo felizmente en las telarañas que me rodean tanto a mí como a mi vetusta jarra de
grog, aparece, sonriente, ufano y feliz como siempre, moriarty, el hombre de la sonrisa fresca y segundo capitán de la expedición. Charloteamos, como solemos hacer habitualmente, sobre los últimos juegos adquiridos, otros a los que les hemos echado el ojo, tenemos ganas de estrenar/probar, etc. Reponemos fuerzas con el tentempié de rigor. Paulatinamente van llegando el dicharachero MoNjE, el bueno del siempre bienvenido babuino y la señorita duende, tercera pirata en ciernes y que ya a pasado a nuestra particular ludo historia por su ya famosa tesis sobre el sexo de los juegos [véase
http://www.labsk.net/index.php?topic=67930.msg747631#msg747631. Son más de las diez y media... La charleta continua a más bandas, algunas cenas más, intercambios de juegos, se une a la jarana Corwin. Aquello parece que depega... Poco a poco voy desgranando las reglas, recibimos los capitanes, elegimos barco, recibido una carta de gloria... ¡Levad el ancla!¡Desplegad las velas, que nos vamos!
Javi recibe como capitán a Cinco de Iapuato, cuya capacidad de guardar oro en su alijo en cuatro sitios resultaría más adelante fundamental. Geni cuenta en sus filas con Frances Wright, cuya capacidad de reparar un punto de daño "by the face" en puertos ingleses fue sistemáticamente ignorada y por mi parte cuento con la ayuda de Sikuma, que puede hacer que los piratas repitan una tirada exitosa de otear, como no podía ser menos, convenientemente ignorada también a lo largo de la partida. Todos elegimos balandros como barcos de partida. Trully nos hace una rápida visita. Sigo explicando reglas, la gente está cansada todos tenemos ganas de empezar así que dejo algunas para más adelante/sobre la marcha y nos ponemos al lío.
dos de los tres capitanes que se batieron el cobre en el CaribeMe hice con la misión de puertos comerciales holandeses que requieres superar pruebas de influencia con éxito en cuatro puertos diferentes no holandés y volver a Curaçao (¡el puerto de origen de mi capitán!) para recibir 20 monedas de oro. Con mi reputada mala suerte con los dados (¡a pesar de lo que me gustan!) estuve brujuleando por toda la parte occidental del Caribe intentándolo infructuosamente en todo puerto al que llegaba. En La Habana confirmé el rumor que tenía (tras algún que otro previo intento infructuosos de conseguir alguno, eso si, perdiendo religiosamente las dos piezas de oro pertinentes) del abandono por parte de su tripulación del capitán Price, que agradecido me permite coger rumores gratis y sin tirada de influencia en ese puerto además de garantizarme siempre la entrada en el susodicho puerto. Finalmente, y tras muchas tribulaciones, conseguí llegar a Nassau donde quería contratar a un especialista que me daba una carta de gloria pero llevaba varios turnos sin un chavo y no pude pagarlo. Al menos, después de visitar seis puertos, algunos varias veces, tenía establecido ya cuatro puertos de comercio y mi intención era poner rumbo a Curaçao para conseguir esas necesitadas 20 monedas, aun a riesgo de ser destino y botín conocido por el resto de capitanes. Como no podía comerciaŕ ,ya que no podía comprar nada para venderlo posteriormente, porque no tenía ni un doblón, de camino a mi destino decidí librar los mares de un balandro pirata que asolaba la zona. Fue presa fácil de mis cañones y lo rematé con un abordaje en toda regla (esta vez no se puede decir que no tuve suerte). Cinco piezas de oro para la saca, otro punto de gloria con su consiguiente carta de idem. No me dió tiempo a llegar a mi destino. Además de la recompensa por la misión tenía un par de rumores (gracias a una carta de rumor precisamente), uno de ellos a confirmar allí también así como un par de cartas de especialistas contratables allí o en tránsito.
Sin querer, acabé como mercader con un balandro lleno de mejoras (cañones, casco reforzada, mejor maniobrabilidad...), ninguna munición especial, con una misión casi completada, un par de rumores confirmado, pocas y no muy rentables transacciones comerciales y habiendo librado a los siete mares de un peligroso bajel pirata.
Geni empezó titubeante y navegando en un mar de dudas, además de en el Caribe. Sin darse cuenta empezó vendiendo 2 mercancías demandadas en el puerto que estaba consiguiendo unos jugosos réditos. Todo parecía irle viento en popa hasta que confirmó el rumor sobre el cobarde pero influyente Barón de Cantellez, que nada más ser avistado se rindió cobardemente y trató de sobornarla con cuatro cartas de carga y 5 monedas de oro para que no hiciese pública su ignominia. Como todos estabamos en el papel, la buena de Frances Wright, jaleada por el resto de capitanes, optó por quedarse con lo ofrecido y tras acabar con la vida de cobarde noble, encontrar diez monedas de oro adicionales, eso sí, acompañadas de dos sendas recompensas que ofreció la corona inglesa por el ataque a su nobleza. De este manera, pasó a ser pirata buscada por Inglaterra, además de no poder fondear en sus puertos (prohibición que fue sistemáticamente ignorada sin que ninguno nos diésemos cuenta hasta casi el final de la partida). Creo ya había hecho alguna misión y/o algún rumor y ya tenia un montoncillo de oro, pero a partir de aquí la cosa fue empeorando. Le cayó otra recompensa adicional merced a una carta de evento, y en turnos posteriores Cinco de Iapuato le fue levantando sistemáticamente las mercancías y/o mejoras tras las que iba, ya que se adelantaba a sus movimientos. Cambió el barco por un "flute", ya que quería más capacidad de carga, y finalmente acabamos parecidos de puntos de gloria (3 ó 4 seguro, no sé si alguno de los dos llegamos a cinco, creo que no).
que los pequeños huesecillos te sean propicios
Javichu, como casi siempre, fue el que más rápidamente y mejor capto la mecánica del juego. A las primeras de cambio llevó a cabo la misión de llevar especias compradas en Curaçao al conde de Chateaurenault, que las pagaría, una sola vez, a 9 monedas de oro cada una. También fue el primero (y el único) en asaltar un mercante, lo que inmediatamente le convirtió en pirata buscado por Holanda, pero posteriormente gracias a una carta de evento, creo recordar, pudo comprar su perdón. Compraba, vendía y se movía con soltura. Nos apremiaba a la hora de repartir las mercancías y nos instaba a leer los rumores tras acabar nuestro turno, por ejemplo, tratando de dinamizar e imprimir ritmo a la partida. Finalmente compró una fragata, conservando todas sus mejoras (culebrina, cañones de largo alcance, capacidad de carga mejorada...) por hacerlo en St. John y fue capaz de derrotar a una fragata holandesa tras un intenso cañoneo donde se llevó la peor parte pero se llevó el felino al agua en un devastador abordaje. Tenía cuatro o cinco puntos en su alijo y aunque (creo recordar que) contamos erróneamente el dinero no guardado también como puntos de gloria iba claramente en cabeza cuando sobre las tres dimos por finalizada la partida dado que el dueño del local hacía algún tiempo que se hallaba enfrascado en tareas de limpieza y mantenimiento y tampoco era cuestión de tenerle allí por nosotros para una vez que podía acabar "pronto". Salvo debacle mayúscula o algún giro inesperado de eventos hubiera sido cuestión de unos turnos más el que hubiera ganado al llegar a los perceptivos 10 puntos de gloria, asi que sin duda, justo vencedor.
más o menos así lució la cosa 
Hicimos varias cosas mal, algunas corregidas sobre la marcha, otras ya de cara a próximas partidas, pero pasamos un rato estupendo.
"Hay que repetir, hay que repetir" insistía una y otra vez, cual loro pirata con su peculiar pronunciación de la "r",
Barbie Mª Eugenia. "Este lo llevas", sentenció lacónico Javi, con mirada lánguida y cigarrillo "after hours" ladeado en la comisura de los labios, en referencia a los juegos que llevaremos a las CLBSK la semana que viene. Por mi parte, me acosté sobre las cuatro, totalmente exhausto, pero estuve dando vueltas sin poder dormir durante unas ¡tres horas!,con la cabeza llena de imágenes de barcos piratas, cañoneando y abordando, surcando las aguas de Caribe tratando de llevar a cabo una misión o de confirmar un rumor. Cuando me desperté a las 8:50, intenté en vano durante una hora, volver a conciliar el sueño pero sólo tenia este relato de nuestras andanzas en la cabeza y finalmente, a pesar de poder y tener que dormir más, me levanté para intentar plasmar la experiencia antes de que se perdieran más detalles.
A pesar los pesares, errores, peculiaridades (¡sólo se asaltó un barco mercante! y sin embargo se atacaron dos barcos NCJ, p. ejem.), etc., propios de la partida inaugural, fué toda una experiencia... vivimos una o dos guerras entre las superpotencias de la época, alguna de ellas mostró su clemencia perdonando pecadillos veniales a cambio de unas monedas, sufrimos tormentas tropicales, un puerto fue conquistado y cambió de nacionalidad, duelos a cañonazos, abordajes, se intentan completar las misiones y confirmar rumores, ... en fin, todo contribuye a crear un universo vivo, cambiante, en constante evolución, lo que a su vez haga que sea un juego tremendamente inmersivo. Un juegazo en toda regla, totalmente recomendable. Como he leido recientemente, no sólo es posiblemente el mejor juego mesa de piratas si no que es un estupendo juego de aventuras. Poco más se puede decir.
¡Hasta la próxima y que lo disfrutéis con salud y en buena compañía!
[fotos sacadas de BGG]
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