Os pongo en antecedentes (no mencionaré nombres, para no dar pie a malos entendidos).
Un cliente mío compró un juego de los caros y le salió con un componente defectuoso. Vino ese mismo día a la tienda y me lo comentó. Yo le cambié el juego por uno nuevo sin más historias. Luego me puse en contacto con el distribuidor para comentárselo y que me dijera si me reponían el juego o me mandaban la pieza corregida. El caso es que el distribuidor me explicó que, como favor, se encargaría de gestionarlo pero que tendría que haberle dicho al cliente que se pusiera en contacto directamente con la editorial para que le enviaran la pieza correcta, en vez de darle un juego nuevo.
Francamente, me pilló un poco por sorpresa. Yo tenía asumido que nos correspondía a las tiendas el reemplazar los productos defectuosos y luego apañárnoslas con las editoriales. No me parece lógico que a un cliente que acaba de fundirse una pasta en mi tienda le diga que no es problema mío, que se las arregle él con la editorial.
¿Qué os parece a vosotros?