Pues nada, yo creo que Reinhart ya ha contado en otro hilo casi todo lo que había que contar (
http://www.labsk.net/index.php?topic=10482.msg113660#msg113660). Pero por si acaso yo voy a dejar mi versión más simplona de lo acontecido acompañada de algunas foticos un pelín cutres que he ido sacando sobre la marcha.
En primer lugar el mapa desplegado antes de empezar.
mapa desplegado (clickar para ver más grande)La orientación del mismo engaña un poco porque la parte de abajo es el Este (o sea, Francia) y la de arriba el Oeste (o sea, el sur de Inglaterra). Pero como bien ha dicho Reinhart antes de empezar, es una reproducción prácticamente exacta tanto en diseño como en disposición del mapa original que tenían en el centro de control de la RAF durante la Batalla de Inglaterra. Así que tampoco es cuestión de quejarse...
En nuestro caso y al elegir el escenario 1 que consta de un solo raid, la cosa ha sido muy sencillita, pues toda la acción se ha centrado en la zona más estrecha del Canal de la Mancha, justo a las afueras de Dover y pegando con un pueblecito (Deal) en el que, casualidades de la vida, pase un verano de niño aprendiendo inglés.
zona de juego del escenario (clickar para ver más grande)Justo debajo del pueblecito en cuestión se encontraba el convoy naval que la Luftwaffe, comandada por DReaper y un servidor, tenía que destruir a toda costa. Para ello contábamos con un
gruppen de Stukas como bombarderos y otro de Me110 como escolta en altura. 25 aviones de cada modelo de los cuales unos cuantos no han vuelto a la base.
La mecánica del juego es bastante sencilla: los alemanes tienen que mandar un raid tras otro para intentar alcanzar los objetivos en Inglaterra y la RAF tiene que utilizar sus escuadrones de Defiant, Hurricanes y Spitfires para intentar pararles los pies o, al menos, hacerles el mayor daño posible.
Cierto es que luego todo se complica con multitud de detalles en cuanto a la composición y autonomía de los distintos escuadrones, su despliegue y plan de vuelo, el tiempo atmosférico, las detecciones visuales y por radar, la comunicación con los centros de mando, etc., etc., etc. Pero lo cierto es que, siendo un absoluto novato en wargames aéreos, todo parecía tener bastante lógica y era fácil entender a la primera lo que estaba ocurriendo.
Para ambos bandos resulta fundamental el timing de sus acciones. En el caso alemán, porque debe utilizar el mayor número de engaños posibles en cuanto a el número y objetivo real de sus misiones para provocar salidas aéreas infructuosas de la RAF y colar sus ataques en el momento en el que haya menos moros en la costa (nunca mejor dicho). Y en el caso de los británicos, porque tienen que gestionar sus escuadrones de la manera más eficiente para tener siempre unos cuantos de ellos en el aire con los que patrullar las diversas zonas de cada escenario y poder reaccionar lo más rápidamente posible cuando los aparatos enemigos son detectados.
En nuestro caso, y como era la primera vez que jugábamos, todo ha sido bastante más torpe y de buenas a primeras hemos mandado a los muchachos de Göering hacia Inglaterra utilizando un señuelo en paralelo que sólo ha distraído levemente al enemigo.
Además, al ser un escenario muy sencillo con un solo raid, era bastante más complicado pillar desprevenido a los británicos ante la imposibilidad de enviar varios ataques simultáneos.
En cualquier caso, en menos de media hora en la escala del juego (6 turnos) nos hemos plantado desde Francia en las cercanías de nuestro objetivo, donde se ha desatado el primer combate con la escuadrilla de Defiants que protegía el convoy.
zona de objetivo ampliada con la zona de combate marcadaAl entrar en contacto con el enemigo y ser detectados con éxito, el combate se despliega en una caja anexa para no acumular multitud de counters y marcadores sobre el mapa.
caja de combate con las distintas escuadrillas implicadas y sus altitudes de vueloEl combate se resuelve entonces con los atacantes disparando primero y los defensores respondiendo acto seguido, aplicándose toda una serie de modificadores tanto para definir el tipo de intercepción (normal o desprevenida) como el daño inflingido a cada bando. Después los cazas de escolta pueden intentar intervenir para atacar al enemigo. Por último se chequea la cohesión de todas las escuadrillas que han intervenido en los distintos combates para ver como de desorganizadas se encuentran, algo especialmente importante pues obliga en muchos casos a los cazas a volver de inmediato a la base.
Una vez llegado al objetivo los bombarderos lanzan su pequeño arsenal (en este caso en picado al tratarse de Stukas) y corriendo de vuelta para Francia intentando no sufrir muchas más bajas durante el regreso con los cazas británicos persiguiéndote cual perros de presa.
Así las cosas y a pesar de haber cosechado un buen número de puntos de victoria gracias a un bombardeo completamente exitoso, la gran cantidad de aviones teutones derribados (9 bombarderos y 3 cazas) han hecho que el resultado final del escenario se decantase del lado inglés.
Y es que las posibilidades de hacer pupa en los combates aéreos son siempre mucho más altas para el atacante que para el defensor. Y como la RAF es la que suele atacar y la Luftwaffe simplemente se defiende o como mucho contraataca, el número de bajas alemanas acaba siendo casi tan importante para la victoria como los objetivos bombardeados con éxito en Inglaterra.
Lo cual, como casi todo en este juego, representa de manera excelente lo que ocurrió en la auténtica Batalla de Inglaterra, donde las bajas alemanas multiplicaron por cinco o seis las de los británicos.
En resumidas cuentas, un wargame con un nivel de simulación altísimo al que cuesta pillarle el tranquillo de primeras con tanto detalle. Pero, una vez asimilada la mecánica, realmente es mucho menos complejo de lo que parece.
La única pega que se le puede poner es lo excesivamente exhaustivo de algunas reglas y la proliferación de tablas para realizar un monton de acciones. Además de que hay mucha información oculta del bando alemán con respecto a las detecciones que hace imprescindible una absoluta buena fe por ambas partes para evitar cualquier tipo de mal rollo.
En cualquier caso, un gran juego que en escenarios más avanzados seguro que gana en riqueza y emoción al poder contar con más raids simultáneos, más objetivos en el interior de Inglaterra para tener varios frentes abiertos a la vez, y más posibilidades de ataque para el alemán (con escuadrillas de caza en avanzadilla para "limpiar el terreno" de aparatos enemigos) y de defensa de objetivos para el británico (con cañoñes y defensas antiaéreas).
Por otro lado, tal y como comentábamos al final de la partida, es un juego que parece prestarse bastante bien a un formato multijugador, con varios jugadores alemanes llevando cada uno distintos raids y varios jugadores ingleses cada uno ocupándose de una zona aérea del mapa.
Así que a ver si en breve volvemos a repetir con la incorporación de algún nuevo "fichaje".