Si hay empate de provincias dominadas entre las facciones, la facción ganadora es la que haya ganado la última revuelta. Por ejemplo, si la resolución ha sido Amarillo-Rojo-Amarillo-Rojo-Azul-Azul-Británico-Británico, la facción ganadora es la azul, porque las tres están empatadas, y la azul ha sido la última en ganar.