Yo dejo un eurito para pensármelo. Sobre todo porque en una reseña dicen que los enemigos finales no son un reto.
Los lugares y fondos donde se ubica son inspirados en Japón, algunos son incluso reales. Y el arte es una mezcla, algunos personajes si tienen bastante influencia (el tío sentado con 3 o 4 pantallas alrededor, el perro, el robot-gato con la niña encima...), otros no.
De todas formas, es mucho decir, porque en el estilo japonés pasas de Doraemon a Candy candy dando una vuelta por Shin chan, cruzando por Dragon ball y un rodeo por Berserk y se parecen un huevo a una castaña.