Pues en mi caso jugamos bastantes veces a los que tenemos, así que yo estaría en la opción A. Además, habiendo preponderancia en los preferidos, a algunos jugamos casi a diario. Solamente hay tres que no hemos probado aún, dos porque son wargames y ando aún enterándome de las reglas, y el otro porque es a partir de 3 jugadores y el resto de la gente prefiere lo conocido últimamente antes que aprenderse más reglas.
La verdad es que sí que siento el placer ése al que aludís de abrirlo, toquetearlo, colocar las piezas por aquí y por allí, olerlo, pero afortunadamente hace un tiempo sufrí una crisis de espacio monumental por culpa de otra afición, y dese entonces, sólo compro lo que sé que voy a usar asiduamente. Y si entra algo que no, lo pongo a la venta inmediatamente, cosa que últimamente afortunadamente no ocurre pues voy acertando de pleno.
Esto tiene el inconveniente de que dispongo, en comparación con el resto de los foreros, pocos juegos, pero en cambio estrujo y saco jugo a los que poseo. En casi todos los casos, esto es una ventaja realmente impresionante. Hay juegos a los que, si no hubiese jugado más, hubiese sacado de casa enseguida, y en cambio, gracias a esta profundización, algunos se han llegado a convertir en favoritos.