A mí el juego me ha gustado. Reglas sencillas, preparación ligera, tiene ese factor suerte que te mantiene en tensión y alimenta esa relación de amor/odio con los dados.
Por poner alguna pega, creo que el tablero es innecesariamente grande. Pero tampoco es un drama. Y si no lo juegas muchas veces de seguido te entretendrá bastante tiempo.