Solo he jugado 2 o 3 veces, y siempre me ha gustado mucho. Muy tàctico y algo diplomático... cuidar al vecino y sobretodo al que menos puntos tiene (ya que es el quien decide el orden de juego), colocar correctamente tus tropas, administrar los (caros) mercenarios... vaya, un juego muy completo.
Lo unico... es que no deja de ser un juego "de coco"... y a veces da pereza ponerse a jugar.
Por lo de los pueblos y de las ciudades:
Un pueblo no se puede conquistar... así que entrar dentro no es un ataque sino un movimiento normal y, luego, no da puntos de victoria.
Sólo el baron, los mercenarios y la infanteria pueden atravesar o quedarse dentro de los pueblos o ciudades que controlan. Los caballeros (incluso el 1er caballero) no pueden entrar, pero sí atacar unidades que esten en el pueblo o la ciudad.
Los pueblos dan un bonus defensivo de +3 cuando los atacan, y las ciudades de +7.
¡Definitivamente, tengo que volver a jugar a este juego!