A ver si nos entendemos...
...yo veo toda la publicidad de lo bonito que es reunirse con la familia por Navidad y esas cosas...
...y en la práctica me veo arrastrado, de forma obligada, a un porrón de reuniones familiares con gente a la que no soporto, y que probablemente no me soporta, y con quien supuestamente tengo que intercambias regalos. Aunque nos demos asco los unos a los otros.
Si eso no es digno de odio, que vea Odín y lo vea, con el ojo que le queda.
Es que es la leche, cuando le haces un regalo a alguien y te sale del corazón, la sensación no tiene nada que ver. Hace unas semanas le mandé un regalo por correo a una persona que vive al otro lado del mundo y a la que no he visto en la vida. Eso me hace más feliz que regalarle roña barata a un sobrino que no soportas, por las presiones familiares.