(...) el resto de los colegas están deseando de darle otro tiento y
hay que aprovechar que todos tenemos las mecánicas muy frescas.
El único problema, es que no es sencillo hacer coincidir a 8 jugadores.
Pero lo mismo es antes de lo que pensaba... Ya os iré contando.
Pues se jugó anoche! Encima con el número mágico de 8!
Y
hubo Cosa! Pero... se dedicó a mantener un perfil-muy-bajo, demasiado. Evitaba encuentros con otros jugadores, inclusive con los perros (sólo uno, y dijo que encima el chucho le "contagió") por lo que en el Track de Sospecha apenas despuntaba. Lo cuál no es mala táctica, hasta que los humanos consiguen hacer acopio de materiales.
Pese a que la Base ya daba síntomas de deterioro (a oscuras, sin casi comida y con la Caldera a punto de petar), teníamos los Lanzallamas (2), el Cable y varias Bolsas de Sangre válidas, con lo que desenmascararle fue sólo cuestión de tiempo.
Nos quedó la duda, de subir al helicóptero al último sospechoso al que no hubo tiempo material para hacerle un Test. No obstante, confiamos en él -nunca sabes si lo del contagio del perro era un farol o había otra Cosa original- y conseguimos huir los 6 humanos supervivientes (Bennings, fue asimilado en la Estación Metereológica).
Nos lo volvimos a pasar muy bien, otra vez que nos fuimos a las 3 horas, pero porque las charlas de sospechas, acusaciones y señalamiento de sospechosos en la Sala de Recreo eran la salsa del juego, y nos enrollábamos un montón. Tal vez
La Cosa debió elegir una táctica un poco más "social", yendo a hacer algún apoyo de reparación en la sala de Radio, la Caldera, o el Generador.
Lo cierto es que es un juego realmente divertido, y la sensación de paranoia está muy bien trasladada de la peli al tablero.