Gracias Hida.
A mi el Descent me recuerda a mis tiempos de D&D (salvando las distancias claro está), donde nos adentrábamos en temibles dungeons a librar al mundo de males ocultos y de paso a sacarnos unas perrillas... xD
Y de nuevo gracias por la recomendación de poner en la firma el blog, no había caído en ello.