Wallace es mi diseñador favorito, pero no calificaría sus juegos como euros puros: suelen tener un grado de interacción difícil de ver en otros euros (razón por la que me encanta).
Además, el tema suele estar bien integrado. El inconveniente es que suele haber más reglas y excepciones que en un euro normal. También es verdad que muchos de sus juegos combinan ideas brillantes con aristas sin pulir.
Byzantium, el cual mencionas, a mí me encanta. Wallace tiene juegos más desconocidos pero muy, muy chulos. El problema es que la mayoría están descatalogados.