Una pega bastante gorda que no he visto comentada es que hay 0 posibilidades de controlar que se están siguiendo las reglas. Con una pantalla entre los dos equipos, es una cuestión de plena confianza [...], pero cualquier juego que no pueda hacer cumplir sus reglas tiene un serio problema.
Joder, es que para hacer trampas, mejor ni juegues, creo yo.
El caso es que muchas veces no se trata de que alguien haga trampas, sino que se puedan escapar detalles y reglas por el propio ritmo de un juego o por la cantidad de reglas a recordar. Y sí, en Captain Sonar no hay forma de saber si se están cumpliendo las reglas o si tu rival está cometiendo errores (que considero involuntarios), por ejemplo, a la hora de trazar la trayectoria de su submarino (que juraría que es lo que ocurrió en una de las partidas).
Debemos tener mucha suerte aquellos de nosotros que ni nos planteamos que alguien vaya a hacer trampas...Y no estoy de acuerdo en que sea responsabilidad del diseñador el impedirlo: yo si me entero que juego con un tramposo te aseguro que no vuelvo a jugar con él. La criba la hago yo no juntándome con tramposos.
Es un juego que en mi grupo ha gustado muchísimo a todo tipo de gente, yo lo recomiendo, es muy distinto a todo lo que he probado. El único handicap es lo limitado del número de jugadores (ni me planteo jugarlo por turnos).