Además siempre intentamos darle más emoción no leyendo lo que pasa a continuación y si presenta opciones la carta tampoco las leemos.
Muchas veces he ido al grano, más que nada por falta de paciencia, pero entiendo que esos textos de ambientación son el fundamento de una tirada de dados que, de otro modo, puede considerarse absurda o una acción aislada inconexa. Junto con la impresión visual del tablero y de los demás componentes, los textos intentan ayudar a la inmersión temática, logrando crear en la mente de los jugadores una atmósfera aventurera. Cuando uno se deja llevar un poquito, la partida crece en emoción.
Jugar ese juego es vivir una historia, no tirar dados. Los dados sólo sirven para decidir los giros que da la historia, pero el juego es la historia no el resultado de las tiradas.