La editorial SinPaGames presenta
Animo City, un juego de cartas sobre desarrollo urbanístico competitivo. Podéis bajar el juego de forma gratuita en formato print and play:
Desde BGG (versión en inglés)Desde BGG (versión en castellano)Está disponible en castellano y en inglés.
Videorreseña:
Se trata de un juego ágil y sencillo (un filler) de pocos componentes, que se ahorra el tablero pero sin renunciar a la existencia de casillas e información espacial. Al final de la partida sobre la mesa se habrá construido una ciudad con las cartas jugadas.
Cada carta de edificio pueda utilizarse como tal, o como parcela si lo juegas boca abajo, para luego recuperar esa carta en cuanto construyas OTRO edificio en la parcela, de forma que te obligue a planificar tus jugadas.
El juego inicial cabía en un mazo de 66 cartas, pero ya que algunos jugadores tienen problemas en visualizar un tablero imaginario, se han incluído 18 cartas de "montañas" para delimitar el tablero, más 5 cartas de "matojos" para señalizar construcciones fallidas, aumentando este número a 89. También son necesarias algunas fichas para llevar la puntuación.
Todo el juego transcurre en una única zona central común. No hay tableros individuales ni nada que incentive jugar en modo autista. Las acciones de cada jugador afectan directamente a los demás, dejándoles sin espacio donde construir, o directamente jodiéndoles la megaurbanización plantándoles al lado una fábrica molesta.
El nombre Animo City tiene un significado doble. En inglés, se prununcia casi igual a "animosity", y deja ver que cada jugador va a erigir sus edificios de forma egoista. Esto no es una ciudad idílica donde las facciones colaboran en crear un urbanismo perfecto, esto es una ciudad española real de tiempos de burbuja inmobiliaria donde familias ricachonas se disputan las mejores parcelas para sacar adelante sus pelotazos inmobiliarios. El urbanismo de mierda es inevitable.
En castellano, el nombre también viene a significar "la ciudad del ánimo", que se debe a que los puntos de Victoria dependen únicamente de lo "felices" o "tristes" que terminen siendo los edificios que cada jugador construya.
Los comercios quieren poca competencia alrededor, la clase baja quiere no estar demasiado masificada, la clase media quiere estar bien conectada, la clase alta quiere que la dejen tranquila, las empresas quieren dominar puntos clave, las fábricas molestan y los parques agradan a quienes estén alrededor. También hay edificios especiales, en teoría son neutrales pero añaden reglas de puntuación importantes. Cada jugador puede elegir el emplazamiento de uno de estos edificios especiales y conseguirse muchos puntos si ha jugado sus edificios para aprovechar esto al máximo. Por ejemplo, el Centro Comercial putea a los comercios cercanos, el Hospital beneficia a todo lo cercano, la Estación beneficia a todo lo dispuesto en una línea recta (porque determina la arteria de mayor movilidad de la ciudad), etc...