Malinterpretaciones en la red

Por lo visto, la mayoría de las personas interpretamos la realidad desde una ventana de dos dimensiones: una que recoge nuestra experiencia y otra que refleja nuestra educación y formación. Lo que percibimos del mundo y lo que entendemos de él está totalmente condicionado por lo que hemos vivido y por lo que nos han enseñado o hemos aprendido a lo largo de nuestra dilatada vida. Es lo que vemos; es el paisaje en el que nos movemos. Y por eso, cada persona ve las cosas de manera diferente. Esa ventana es el filtro a través del cual interpretamos la realidad, y a partir del cual valoramos las situaciones que vivimos, tomamos decisiones y nos relacionamos con los demás.

Esta ventana puede ser enriquecida introduciendo otras dimensiones, como por ejemplo la personalidad de cada uno. En principio, es muy útil para entender la actitud de las personas hacia la mayoría de las situaciones que les toca vivir, pero en ocasiones, puede convertirse en una peligrosa arma de doble filo. Si uno tiene prejuicios, filias y fobias, eso se verá reflejado directamente en la forma que uno ve e interpreta lo que le llega a través de esa ventana.

Con la llegada de las nuevas tecnologías, la información que llega esta ventana ha crecido exponencialmente. Y tenemos el problema añadido que lo que nos llega está basado únicamente en el lenguaje escrito. Si a esto sumamos que, según un estudio científico, más del 40% de lo que escribimos en un mensaje en la red es malinterpretado, pues entonces tenemos un verdadero problema.

Según un estudio de Justin Kruger de la Universidad de Nueva York y Nicholas Epley de la Universidad de Chicago, que si no me equivoco apareció en la Journal of Personality and Social Psychology, estas malinterpretaciones del lenguaje escrito se dan, precisamente porque éste carece de un tono de voz y expresiones faciales, que son los que en el temido mundo real nos dicen si una persona está enojada, feliz  o receptiva, debido a, créanlo o no, que el 97% de la comunicación depende principalmente del lenguaje corporal y el tono de voz, en tanto que sólo el restante 3% se trata exclusivamente de las palabras.

Una segunda razón, también explicada por estos profesores, indica que, cuando escribimos una respuesta, principalmente un correo electrónico, un twit, o un comentario en un foro o en un blog, lo hacemos de manera rápida e impulsiva; muchas veces sin pensar dos veces lo que escribimos. La inmediatez de internet hace que todo vaya mucho más rápido y a una velocidad de vértigo, y a veces parar a pensar algo pausadamente para discernir con meridiana claridad lo que se quiere expresar evita problemas añadidos.

Discusión

El mismo profesor Kruger es el descubridor de lo que se ha llamado efecto Dunning-Kruger, un fenómeno psicológico según el cual las personas con escaso conocimiento tienden sistemáticamente a pensar que saben mucho más de lo que saben y a considerarse más inteligentes que otras personas más preparadas, debido a que su propia incompetencia les dificulta reconocer sus errores y evaluar la competencia de los demás. Y esto, nuevamente en internet se magnifica por diez.

Y ya para finalizar, tenemos la Ley de la controversia de Bedford, muy ligada al efecto Dunning-Kruger. Se trata de una ley sociológica aplicable especialmente a las discusiones de los foros de Internet. La enunció el autor de ciencia ficción Gregory Benford en la novela Cronopaisaje (1980) (os adelanto que no la he leído, pero me la anoto para el kindle), y establecía que: «La pasión asociada a una discusión es inversamente proporcional a la cantidad de información real disponible.»

¿Qué debemos hacer entonces para evitar estas molestas malinterpretaciones? En primer lugar, no tomar nunca como algo personal lo que alguien escribe en la red; si no se te menciona directamente, no des por supuesto que va contigo o dirigido a ti, quizás no vaya por ahí la cosa. Tratar de leer cuidadosamente y reflexionar acerca de los mensajes que se quieren transmitir por la red. Deja la pasión e impulsividad a un lado, a veces es mejor abstenerse de escribir algo, que hacerlo precipitadamente sin tomarse un momento de respiro para meditar y pensar lo que se quiere transmitir en realidad. No trates jamás de justificarte, por mucho que lo hagas seguirán malinterpretándote y la bola de nieve se hará mucho más grande;  así que si llega una confusión lo mejor es respirar hondo, y si realmente merece la pena resolverla, hacerlo cara a cara. Y por último, olvídate de todos tus prejuicios; solo te traerán problemas añadidos. Si sigues estas recomendaciones, posiblemente lo que pase por tu ventana será mucho más blanco (y placentero).

PD. Pido disculpas públicas a todos por las malinterpretaciones del pasado y las que vengan en el futuro.

Por favor, sígueme y dale a
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8 thoughts on “Malinterpretaciones en la red

  1. Más que discutible.
    Hay quien piensa que la realidad no existe como tal, que es imposible de aprendeher. Y hay incluso una triada espectacular, Marx, Nietzsche, Freud, que revelo como hay mecanismos de ocultación. Individuales, sociales, culturales, etc. Fueron ellos tres los que comenzaron a revelar lo oculto.

    Pretender que un texto es plano pues eso. Hasta diría que malinterpretación es un termino sesgado como dando a entender que no es posible otra interpertación que la que tenía el autor, ¿pero es esto cierto? ¿no será que lo llamamos malainterpretación a veces no sea una interpretación no deseada?

  2. Puede ser, pero yo prefiero pensar que es una malinterpretación (de que el mensaje no llega correctamente al receptor) a una interpretación no deseada (que llega bien y el receptor lo tergiversa).

  3. Decía un psicólogo que me dió un curso hace tiempo, que si el mensaje no llega correctamente a su destino es siempre culpa del emisor, que es el interesado en hacer que llegue.

    En un principio no estaba de acuerdo, pero al final me acabé convenciendo, e intento acordarme de ello cuando me ocurre algo así. Obviamente, la tergiversación voluntaria siempre es posible, pero eso no se arregla ni cara a cara.

    Pero quitando ese caso particular, estoy muy de acuerdo con lo dicho. El texto no es «plano», pero no todo el relieve se lo da emisor, ni siquiera en su mayoría. La mayor parte de las connotaciones se las da el que lee (de hecho esa es una parte importante de la magia de la literatura, la capacidad de hacernos evocar, que no es más que identificarnos con lo que está contando a través de nuestra propia experiencia). Así, los escritos no los leemos igual si conocemos en persona al que escribe, y hemos tenido oportunidad de recibir todo el resto de la información que viene en el lenguaje no verbal.

  4. Cuando digo no deseada me refiero al deseo del emisor, uno puede encontrar respuestas que no esperaba a estimulos, no es que se tergiverse,

    Mira a Freud lo que decía del subconsiente, o eso que tanto se dice del lapsus freudiano. Con eso quiero decir que puede ocurrir que a veces digamos cosas que no pretendemos incluso ni ser conscientes de las que decimos.

    Y en parte si le entiendo bien, estoy de acuerdo con lo que dice Pedrote, Fijate en el lenguaje de los filosofos, es tan peculiar por que en lo posible intentan evitar las interpretaciones y ajustarse a lo que entienden ellos como realidad.

    Precisión en el lenguaje, quizá sea imposible ser preciso 100% para hay que intentarlos. Y explicarse bien es un arte que muy poca gente domina.

  5. Pues anotado queda. Si el mensaje no llega también puede ser culpa del emisor que no lo sabe transmitir.

  6. Lev Mishkin :Y en parte si le entiendo bien, estoy de acuerdo con lo que dice Pedrote, Fijate en el lenguaje de los filosofos, es tan peculiar por que en lo posible intentan evitar las interpretaciones y ajustarse a lo que entienden ellos como realidad.

    Ese es probablemente el caso más paradigmático: recuerdo que cuando Gustavo Bueno salía por las tertulias televisivas contando sus opiniones se me ocurrió intentar leer algo suyo y me fue imposible, porque el esfuerzo que hacía por ser completamente preciso en lo escrito lo hacía ininteligible para un profano como yo.

  7. José Carlos, es la primera vez que te veo pedir algo parecido a las disculpas y eso ya es un paso, pero lo ocurrido en los dos últimos dias creo que dista mucho de ser una malinterpretación, cuando un montón de gente (la que respondió y la que no) han recibido el mismo mensaje.

    Y es que ese escrito dos días después de Granollers y teniendo en cuenta que el penúltimo sarao lúdico al que acudiste (creo) fué el encuentro de Protos y Tipos creo que no es fruto de la casualidad.

    Porque esta vez tiraste a matar, eso si, evitando nombrar explicitamente el objetivo para evitar conflictos, pero al contrario que en otras ocasiones, la gente respondió y es entonces cuando, a tu manera, te has retractado y lo has achacado a una malinterpretación general.

    No voy a revisar una por una las lindezas que pusiste, porque no quiero volver a estomagarme, pero cuando hablas de «autodenominados autores» subyace un menosprecio hacia todos los que «tristemente» tenemos la ilusión de publicar. No conozco a mucha gente que haya sido varias veces finalista en concursos (entre ellos tú), pero no hablas de nadie en concreto. Incluso se llega a acusar en una desafortunada metáfora, de ser unos pajilleros entre el círculo de autores que nos vamos viendo y jugándonos en diferentes lugares. Y eso, no es una malainterpretación, si no una manera agresiva de reafirmar tu posición de sólo contra el mundo porque no quieres «jugar» a lo que estamos haciendo los demás. Es mas, llevo oyéndote quejarte en los últimos 5 años en los que hemos tenido un trato habitual de prácticamente todo lo que rodea al mundo lúdico desde una postura de observador crítico (demasiado a veces) que te permite tu curriculum y en la que, quizá por miedo al fracaso, no te casas con nada ni con nadie.

    Si querías plantear un debate sobre la autocrítica en cuanto a los prototipos, pues si, creo es necesario (para todos), pero un ataque frontal no plantea un debate si no una reacción de igual o mayor fuerza. Y ojo, que hay muchas maneras de hacer crítica y no todas pasan por decir «tu juego es una mierda», ser sincero no tiene porque pasar por decir las maneras de una forma destructiva.

    De hecho el debate ya está ahí, pero creo que el único perjudicado en todo esto has sido tú por tu forma de decir las cosas.

  8. chemo, este hilo no tiene que ver con el del otro día. Absolutamente nada. La disculpas ya las pedí en el otro hilo que es donde procedía. Y no por lo que dije, sino por si alguien se había sentado insultado, porque no era mi intención. Esta otra reflexión.

    No tiene que ver nada con Granollers, de hecho la entrada del otro día la tenía escrita de antes, mucho antes. Y tampoco hablaba de tí. Como ya dije era una reflexión en voz alta. Y si lo dije, es porque lo pienso. Lamento que haya sentado tan mal. Pero al menos me consuela saber que no soy el único que opina igual.

    Lo mío no fue un ataque frontal, en primer lugar porque no di ningún nombre. Y sobre quien es el perjudicado, el tiempo lo dirá. Como dije, para mi fue muy clarificador.

    Y nos salimos del tema de la entrada.

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