Buenas a todos:
No acostumbro a escribir este tipo de documentos, pero como creo que la ocasión lo merece, ahí va una reseña de este fin de semana, donde hemos pasado las horas inmersos en diversos títulos de la serie 18xx. ¿Cómo que qué títulos?... Ya voy, ya voy...
Vienes 18 de enero de 2019, 17:00:
1830.
Comienza el fin de semana con un clásico. ¿Qué digo un clásico? ¡El clásico! Decidimos poner la banca en 9.000$, para evitar que las últimas rondas se nos hagan demasiado repetitivas. Y comienza el juego. A la mesa: Carmen, Paco, Vázquez, Dani y un servidor, Enrique.
La subasta de privadas resulta un poco extraña y dejamos que se lleven la presidencia de la Baltimore por solo 230$. El resto de privadas también sale algo barato, demasiado barato...
En seguida salen algunas compañías: Vázquez preside la Baltimore & Ohio, que sale a 100$ por acción; Carmen la NYC; Paco la Pennsylvania y yo la Canadian. Curiosamente, Dani decide invertir en acciones de los demás y no sacar ninguna compañía; así durante unos cuantos turnos. Para que la Baltimore no haga demasiado daño, me hago de algunas acciones (también de otras compañías) y empiezo a venderlas para bajar su valor. Dani aprovecha para rapiñear las acciones de la Baltimore y se hace con un 40%; así es como me quedo sin acciones de una de las mejores compañías del juego. Creo que me precipité haciendo el mal.
Lo que parece una estrategia poco interesante o, cuando menos, poco divertida, le renta cada ronda de operaciones unos curiosos dividendos, con los que se va montando una cartera de valores nada desdeñable.
Mientras todos tratamos de ir haciendo lo que podemos, una ronda del mercado de valores se me antoja crucial: Dani tiene la oportunidad de vender su 40% de la Baltimore y encajar el valor de las acciones en un escalón de 80$, jodiendo a Vázquez muchas de sus posibilidades. Sin embargo, a pesar de mis insistentes esfuerzos por convencerlo, Dani decide quedarse con ese 40%. A la larga, le va a colocar en una muy buena posición.
La partida sigue y Dani, por fin, se decide a sacar una compañía: Chesapeake & Ohio. Al frente de la compañía, falla por todos los lados, y sus vías no conducen a ningún sitio rentable.
Gracias a mi experiencia, aprovecho para cerrar espacios, aconsejando a Paco, presidente de la Pennsylvania, cómo cerrar a la Baltimore. Puesto que una privada me permite colocarme cerca de NY, aprovecho para que la Canadian coja parte del pastel de las grandes rutas y, de paso, también voy cerrando a los demás.
Además, es el momento de sacar la Erie, y en la ronda del mercado de valores me adelanto a Carmen, que tenía la misma intención, y la saco yo.
A las 20:00 tenemos que interrumpir la partida, que retomamos el sábado a las 10:00.
Entonces llega el turno que decanta las cosas de forma definitiva. Vázquez saca una tercera compañía, la Boston, que ya tiene todas las vías tendidas. Está obligada a comprar un tren, con lo que los trenes 6 entrarán en juego y los 3 morirán. A mí me viene perfecto, porque así podré comprar un Diésel con el dinero de la Erie, haciendo un par de maniobras, entregando un 4, y rompiendo los 4 de los demás jugadores. Eso me hubiese colocado de nuevo en la lucha, porque la rotura de los 3 y los 4 casi consecutivamente haría que todos se tuviesen que rascar el bolsillo a base de bien. Pero...
Vázquez no compra el tren 6, sino que hace trapicheos entre sus tres compañías y rompe en un solo turno los 3 y los 4, dejándome a las puertas de mi estrategia, y sufriendo yo los daños que quería hacer a los demás.
De pronto me encuentro con más problemas: un cierre me impide lo que pretendía, que no era otra cosa que unir las rutas del norte con las del centro, de cara a sacar el máximo partido a mi tren Diésel (1.100$ del copón).
Dani, entre tanto, ha decidido hundir el valor de la Chesapeake, dejando el precio en los valores más bajos, pero consiguiendo un 95% de la compañía. Eso se traduce en que tiene más acciones que todos y que se mete en el bolsillo más de 200$ fijos en cada ronda de operaciones. Al no contar esas acciones para el límite, puede permitirse ganar pasta con las mejores acciones de la partida.
El resultado final:
Dani: 5.383$.
Vázquez: 5.362$.
Paco: 4724$.
Enrique: 3997$.
Carmen: 3206$.
Tiempo de juego: 5 horas.
Sábado 19 de enero de 2019, 12:00:
1844.
Junto con el 1817, mi 18xx preferido, de largo.
Preparando el juego...Empezamos la partida los mismos que finalizamos la del 1830: Carmen, Paco, Dani, Vázquez y yo.
La subasta de las privadas reparte bastante las cosas: Paco se queda con la que da el túnel largo Furka-Oberalp, yo me quedo con la que da una acción de la MOB, Vázquez se queda con el certificado de presidente de la FNM, Carmen con la que permite poner una loseta y con la que lleva una de túneles y Dani con la que trae el tren «Eva». Esta vez, al menos, todos hemos pagado algo más caras las privadas que en la anterior partida, donde las regalamos.
La partida comienza algo más previsible, sacando la FNM, que siempre empieza operando, y buscando cada uno su compañía. Sale solo una regional, la ChA (curiosamente, será la única que salga en la partida y acabará rindiendo bastante bien), y yo me tiro a por la MOB, ya que tengo un certificado de la privada. Dani en seguida parece que va a seguir una estrategia como la de la anterior partida, repartiéndose la FNM casi a medias con Vázquez.
En las rondas del mercado de valores, pronto nos empujamos para conseguir las compañías de túneles y las de montaña, pero de nuevo dejamos que alguien se destaque; en esta ocasión, es Vázquez, que se hace con la mayoría de estas suculentas compañías. El resto de compañías históricas van saliendo poco a poco, repartidas entre todos.
Tenemos que parar para comer. Dejamos la partida en
stand by desde las 14:30 hasta las 16:00 aproximadamente. Entre unas cosas y otras, retomamos sobre las 16:30.
Curiosamente, hasta que no se acerca mucho el momento de la fusión de las pre-SBB en la SBB, con la compra del primer tren 5, nadie hace mucho caso a esas compañías. Y es que en este juego es difícil estar a todo, sobre todo como vayas un poco a remolque. Pero, de pronto, comienzan a venderse esas acciones como churros y, para el momento de la gran fusión, Dani tiene un 35%, Vázquez un 20%, Carmen un 20%, yo un 15% y Paco un 10%.
¿Y ahora qué hago yo con tanto dinero, tantos trenes y tantas estaciones?...El cansancio hace mella y parece que soy un novato en los 18xx. Estamos ya en la fase de losetas marrones y no he colocado ni una sola ficha de la MOB que presido desde el principio. Y estaba montándome una buena ruta para el momento de los trenes 8E. Pero claro, tonto, de mí, me acaban cerrando...
La cosa parece que está, una vez más, entre Dani y Vázquez.
Calculando las últimas rondas de operaciones de la partida con el excelEl resultado final:
Vázquez: 10.147$.
Dani: 9.266$.
Enrique: 8.737$.
Carmen: 8.587$.
Paco: 7.951$.
Tiempo de juego: 6 horas.
Mejor jugado que el 1830, pero insuficiente para como viene esta gente... Nos vamos a descansar, que la cabeza nos va a explotar a todos.
Domingo 20 de enero de 2019, 10:00:
1846.
Vázquez no puede quedar el domingo, por lo que estamos cuatro: Carmen, Paco, Dani y yo. Mis colegas querían jugar al 1817, pero me resultó imposible repasarlo para el fin de semana, así que propongo o bien repetir el 1844 o jugar un 1846. Ellos, ávidos de nuevos títulos 18xx, no dudan en pedir el 46. Yo encantado, porque es un juego que me entusiasma. Además, aunque es el que tengo más jugado es el que menos juego últimamente.
Hacemos el draft de las compañías privadas y yo me quedo con la tuneladora y con la independiente de Michigan; Dani pilla la reserva de Chicago y la independiente Big 4; Paco sale con la del correo y con la de la carne; y Carmen con las que colocan las losetas amarillas gratis.
Carmen es la primera en jugar y lanza la NYC, quizá por aquello de que es la misma compañía con la que jugó el viernes al 1830. Paco decide salir con la Illinois y Dani con la Baltimore, para hacer simbiosis con su independiente.
Me quedo con el
dealer para la siguiente ronda del mercado de valores.
Yo decido probar algo nuevo, pues me gusta experimentar en estos juegos que son tan y tan profundos, así que saco la Chesapeake, con la que nunca antes había jugado (con más de 15 partidas a mis espaldas). Aprovecho la independiente para sacar bastante pasta y al inicio voy bastante bien, pero cometo un error habitual en mis partidas: me precipito. Carmen, con su NYC, va construyendo vías hacia Chicago, y Dani y Paco van construyendo por el sur. En el momento que me dejan un hueco, coloco mi ficha en Chicago, cerrándoles el paso, pero... Mi error es dejar un hueco a mi espalda, que cierran ellos, impidiéndome conectar este y oeste desde mi salida hasta mi ficha de Chicago; de nuevo error de novatos.
Por otra parte, aprovecho las vías de Carmen y saco la Grand Trunk. Sin que se dé cuenta, le pongo vía y ficha en Chicago, imposibilitándole que tenga acceso. Me las prometo muy felices, pero los chicos son rápidos comprando trenes y veo que vamos a saltar a la fase III y solo tengo tres míseros trenes-2. De nuevo me había precipitado, al no tener solvencia suficiente para sacar una compañía fuerte y con liquidez para gastarse los 450$ que cuesta un tren 4/6.
Mientras tanto, los demás iban sacando rendimiento de sus acciones, pues las tres mejores compañías en seguida se destacaron, siendo justo las de mis tres oponentes. Para cuando pude reaccionar, era muy tarde.
Cuando me las prometía muy felices...La interacción en el mapa, como viene siendo habitual en este título de la serie: muy elevada, cerrando rutas con fichas o con vías de difícil o imposible actualización. Menos movimiento en el mercado, pero con cosas muy interesantes, como la emisión/rescate de acciones. Gran juego.
La partida se acaba y no he podido conectar la Chesapeake con Chicago...Posición finalEl resultado final:
Dani: 6.822$.
Carmen: 6.115$.
Enrique: 5.537$.
Paco: 5.319$.
Tiempo de juego: 4 horas.
En definitiva, un gran fin de semana, jugando unos grandes juegos, en compañía de unas grandes personas. Así da gusto pasar las horas jugando. Creo que ganar, hemos ganado todos (y así es como se consuela uno... jejejeje).
Saludos.