A mi me fastidia tener juegos que son una pasada y que cuando un invitado llega a casa quiera jugar al mardito Monopoly.Eso me lo hicieron a mí una vez y lo solucioné con sangre muy fría: no dije absolutamente nada, jugué normalmente, hice con que me divertía, y al día siguiente cogí el juego y lo tiré al contenedor de la basura. Se acabaron los problemas. Hice lo mismo también con las barajas de naipes y con alguna cosa más.