Compra fundas. Enfundas la carta original, que en español te quedará tal cual y las que estén en otro idioma te dará el reverso y para el anverso usas la carta traducida (maquetada y del mismo tamaño que la original). Todas las cartas (tanto en español como en inglés con su traducción) quedan iguales a la vista y al tacto. Así lo tengo yo y queda niquelao