Ah.... la irrefrenable necesidad de poseer algo.
Tan viejo como el hombre…
Le pasa a un niño con unas botas de futbol,
a una adolescente con una prenda de vestir,
a un papa con un móvil,
a una mama con un bolso a juego con los zapatos…
Con esto, quiero decir que los aficionados a los juegos
no somos diferentes al resto de mortales.
Se podra evitar en tanto seas capaz
de refrenar ese instinto y
poder decidir con el cerebro
en vez de con otra parte del cuerpo
(como se suele hacer en otras ocasiones)
A mi un juego me puede crear
mas o menos expectación,
pero sin jugarlo (o ver una partida)
no lo compro.
Tan sencillo como eso.
Otra cosa seria si no tuviese la facilidad
de poder jugarlo o ver una partida.
Creo que tiene que ver con la disciplina y autocontrol de cada uno…