Hace un tiempo diseñé un juego ambientado en la noche de helloween que me gusta bastante y me gustaría intentar publicarlo, aunque todavía queda un largo camino para eso. La cuestión es que hay un punto del reglamento que no me gusta, la mecánica me resulta demasiado complicada o liosa. No cuelgo el reglamento entero porque no creo que nadie lo lea entero, aunque si alguien lo desea se lo mando. Pero si cuelgo aquí el punto que no me convence. Como veréis se trata de un juego tipo bluff, de engaños y tal:
Ahí va el punto que no me convence:
LAS PREGUNTAS: ¿TRUCO O TRATO?:
El jugador preguntado debe elegir entre “truco” o “trato”.
TRUCO:
Si el jugador elige truco, el niño (de ahora en adelante llamaremos así al jugador que mueve la ficha del niño) lanza el dado de ocho caras sin que el dueño de la casa (llamaremos así al jugador al que corresponde la casilla donde ha caído el niño) pueda ver el resultado de la tirada. El niño debe decir en voz alta “truco” y a continuación lanzar el dado. Dirá en voz alta el resultado de la tirada, pero no está obligado a decir la verdad (los niños son a veces mentirosos).
Tras esto, el dueño de la casa tiene tres opciones:
a. creer al niño
b. dudar del niño y preguntar a otro jugador para saber si dice la verdad o miente
c. no creer al niño (sin preguntar a un tercer jugador)
CREER AL NIÑO (a):
Si el jugador cree que el resultado de la tirada coincide con lo que el niño le ha dicho, simplemente le paga tantos caramelos como le corresponda según la siguiente tabla (tabla de caramelos):
Resultado de la tirada número de caramelos
1- 0
2- 1
3- 1
4- 2
5- 2
6- 3
7- 4
8- 5
NO CREER (b) O DUDAR DEL NIÑO (c):
b – si el jugador duda si creer al niño o no, puede pactar con un tercer jugador para que mire el resultado real del dado y de esta forma le confirme si es cierto lo que dice el niño.
El jugador elegido puede solicitar (si lo desea) al dueño de la casa un pago: bien parte de los caramelos que están en juego (pero nunca más de dos), bien una carta de acción (si tiene). En caso de que solamente haya en juego uno o dos caramelos, el tercer jugador está obligado a pedir a cambio de su ayuda una carta de acción (no caramelos).
El jugador elegido no está obligado a decir la verdad, pero si miente al dueño de la casa, no recibe el pago acordado y además deberá pagar un caramelo al fondo común.
Cuando el tercer jugador compruebe la tirada y diga en voz alta si era cierta o no, el dueño de la casa deberá decidir si el niño dice la verdad o miente.
Si decide que el niño dice la verdad, pasa al apartado a) y le paga al niño la cantidad de caramelos que corresponda según la tabla, descontando de está cantidad los caramelos que hubiese acordado (en caso de hacerlo) con el tercer jugador (nunca más de dos).
Si tras pedir la opinión del tercer jugador decide que el niño miente, pasará al apartado c)
c – se comprueba el resultado de la tirada. Si el niño mentía, ambos jugadores lanzan un dado y el niño deberá pagar al dueño de la casa la diferencia entre ambos resultados, sin importar quien saque el resultado más alto. En caso de empate el niño le entrega un solo caramelo al dueño de la casa.
Si por el contrario resulta que el niño no había mentido, pero el dueño de la casa no le creyó, el jugador lanzará el dado y le entregará al niño tantos caramelos como indique el resultado en la tabla de caramelos (ver apartado a.).
Si el jugador que fue elegido por el dueño de la casa para ayudarle había mentido también, este no está obligado a pagarle nada al jugador.
Si el jugador que fue elegido por el dueño de la casa para ayudarle había dicho la verdad también, el dueño de la casa deberá pagarle dos caramelos de su fondo.
Y aquí viene mi petición: muchos de los que entráis aquí sois jugones y seguro que os daréis cuenta de en que falla el tema. Pues eso, necesito vuestra opinión y saber en que falla esta mecánica. También se aceptan sugerencias de cualquier tipo.
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