Hola a todos.
Acabo de leer los primeros párrafos de ése documento en inglés, y no me agrada el sistema de dividir cada nación en dos facciones, puede ser realista, pero lo veo más complicado.
Yo he maquinado un sistema más colaborativo, 2 contra 2 jugadores, gana una de las dos parejas. No lo he puesto en práctica porque el rendimiento de las estrategias es inferior al estándar de un jugador por nación. Ahí va:
-No se cambia ni se añade ninguna regla, pero la idea es que las CO se jueguen alternativamente entre los 4 jugadores del siguiente modo:
- En los turnos de 7 Cartas, se reparten 4 a un jugador y 3 al otro;
- En los turnos de 8 Cartas se reparten 4 a cada jugador;
- En los turnos de 9 Cartas se reparten 5 a uno y 4 al otro.
- Cada jugador inspecciona sus Cartas sin enseñarlas; en el 1er turno el que tiene 4 de cada bando, le pasa 1 ó 2 a su compañero, y éste a su vez le pasa otra a él simultáneamente, por supuesto sin enseñarlas a los oponentes.
Ahora el jugador romano que tenga 4 cartas, será el que comenzará el juego si juega una de campaña como postulan las reglas, de lo contrario será el jugador cartaginés con 4 cartas el que tendrá la potestad de jugar una de las que tiene o ceder esa acción al romano con 4 cartas en la mano.
Esto supondrá que el jugador con 4 cartas de cada bando al inicio, podrá dicidir quién jugará primero de los dos compañeros dependiendo de si le pasa 2 ó 1 carta al de al lado.
- Depués de que ambos jugadores contrarios con 4 cartas hayan jugado una, en las rondas sucesivas ambos jugadores de cada nación intercambiarán al unísono una CO, y después jugará una el que no jugó antes, y así alternativamente hasta agotarlas.
Si un jugador activa con su carta a Aníbal por ejemplo, lo moverá y de atacar a tropas enemigas, será él mismo quien dirima la batalla con las CBs correspondientes. Esto permitirá que ambos jugadores puedan utilizar al genial General, repartir los diferentes Generales en exclusiva haría que el que maneja a Aníbal juegue mucho más que el otro.
- Cuando un jugador oponente está moviendo un ejército, cualquiera de los dos jugadores podrá importunarle jugando inmediatamente una carta de contraevento.
Lo anterior podrá suponer que uno de los dos jugadores al final tenga bantantes más cartas que su compañero. En tal caso:
- Si el jugador que debe jugar la próxima CO sólo tiene una y, su compañero tiene 3, podrá jugarla sin más o bien, pasársela a su compañero
a cambio de 2, y entonces jugará una de esas 2.
-Si el jugador que debe jugar la CO cuenta con 3 en la mano y, su compañero ninguna, le cederá una de las 3 y después jugará una de las 2 que le quedan.
-En todo caso, un jugador con sólo 1 CO en la mano sólo la cambiará con su compañero si lo desea, no será obligado. Si ambos tienen una única CO, deberán estar los dos conformes en intercambiarlas antes de jugar una al que le toque, de no ser así no se intercambiarán.
Es difícil que en un turno un jugador juegue dos o más contraeventos, pero puede ocurrir por ello conviene poner la norma de 2x1 cuando uno de los compañeros tenga 2 ó 3 CO más que el otro.
-En el turno 4º, primero en que se reparten 8 CO, se hará esto a razón de 4 a cada jugador. Intercambiarán una de ellas al unísono después de verlas, y jugará una primero aquél
que no jugó la última en el turno anterior. Después se irán alternando.
-En los turnos 7º a 9º, de las 9 CO se repartirán 5 a uno y 4 al otro. Este último intercambiará una con el compañero, aquél intercambiará una o dos; al final del trueque el que tenga 5 CO en la mano será el primero de los dos en jugar CO, igual que se explicó para el 1er turno.
El hecho de que antes de jugarse cada ronda los jugadores del mismo bando se intercambien una CO como mínimo, hará que al final -si se cuenta con buena memoria- se sepa las CO que tiene el compañero.
Sin embargo, el hecho de no tener a todas las CO delante antes de planificar la acción, ocasionará que las combinaciones ganadoras sean más difíciles de darse, por lo cual creo que de jugar tres jugadores con este sistema, uno contra dos, tendrá ventaja el jugador solitario, nada es perfecto.
La cuestión de permitir los gestos y los indicaciones directas entre los del mismo bando ya queda al criterio práctico de cada grupo; hasta que no se pruebe no se puede saber qué será mejor.
Siento el ladrillazo, pero todo esto explicado en directo se asimila enseguida.
Saludos cordiales y ya diréis vuestra opinión.
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