pues la verdad, Ben, es que mi pega en el tzolk´in era esa, dale una segunda oportunidad y así vemos si es una sensación solo mía A mi cada vez que repito un juego me gusta probar una estrategia distinta; no soporto jugar como un autómata como si tuviera la estrategia apuntada en un folio y solo tuviera que ejecutarla.No a todos mis compañeros de mesa les pasa lo mismo y jugar con alguno se volvía predecible. yo podía probar calaveras o tirar por el lado tecnológico o la estrategia que se me ocurriera que sé que alguno de mis compis de mesa seguía jugando con el automático: generador de recursos, los cambio, compro, pongo de golpe, a los templos y arriba... se volvía aburrido y predecible.para mi eso es el aporte brutal de la expansión, obliga a todo el mundo a variar su modo de jugar porque la profecía cambia totalmente las hipótesis de victoria: de repente se convierte en adaptación al medio y sobrevive el que mejor lea como jugar como jugar y cumpla profecías "el que no tenga 6 monumentos tal penalziación y el que los tenga tal bonificación antes de la ronda 2"en cualquier caso, los gustos de cada uno son los gustos de cada uno y yo puedo pensar que es básica y otro que estoy chalado.por cierto, Gixmo, si prefieres mil veces jugar con ella que sin ella, eso no lo convierte en imprescindible ?
entonces coincidimos en que premia jugar siempre muy parecido, no? variando un poco pero siempre parecido...ese es el gran aporte para mí de la expansion
Para mi la mejor expansion sin duda: Tormenta de Espadas, la segunda expansión de la primera de edición de Juego de Tronos.Hace de un juego bueno un pepinaco, trae tablero nuevo, y después de jugarla te parece floja hasta la segunda edición Enviado desde mi SM-N910F mediante Tapatalk
eso es lo que digo yo de esa expansion, imprescindible imprescindible no es, pero para mi forma ya parte del basico por esa variedad y asimetria
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