Sólo he jugado una partida, hace ya algunos meses. De hecho dos partidas seguidas, porque en la primera nos fundieron muy rápido y empezamos de nuevo. Ganamos esa segunda partida sin demasiadas dificultades. Así pues éstas son mis impresiones teniendo en cuenta una sola sesión de juego.
Me gustan muchísimo varios juegos de Bauza. Takenoko, Samurai Spirit, Hanabi y, especialmente, Ghost Stories que es uno de mis 4-5 juegos favoritos y, obviamente, uno de mis cooperativos/solitarios preferidos. Oltréé incide en el mismo "género" que Ghost Stories y que Samurai Spirit: un "tower defense" cooperativo, donde los jugadores deben defender en equipo un territorio, en este caso un castillo, resistiendo oleadas de ataques enemigos. La principal diferencia con esos dos juegos es que Oltréé añade una capa narrativa a la partida mediante unos "libros" llamados Crónicas que conforman diferentes escenarios y que no dejan de ser barajas de cartas prefijadas que activan eventos y contienen un texto extra describiendo el evento en cuestión. Las crónicas actúan además como temporizador durante el escenario.
Como ha descrito un compañero más arriba, el juego consiste en mover a los personajes por los alrededores del castillo para obtener recursos que permiten elevar su nivel defensivo, aumentar los niveles de Prestigio, o ir completando misiones necesarias para cumplir algunas de las condiciones de victoria del escenario. Cada personaje tiene habilidades únicas distintas al resto, puntos de salud, una profesión concreta (de cuatro posibles típicas como soldado, artesano, etc), etc. Si los personajes se mantienen vivos durante el escenario, una de las últimas cartas de la Crónica desvela las condiciones finales de victoria y los jugadores se adjudican el triunfo, un triunfo menor o la derrota.
Así pues, ¿cómo definiría este juego y a quién se lo recomendaría? Pues como "tower defense" cooperativo narrativo bastante ligero y de tono muy amable, lo que algunos catalogarían como "familiar". Porque es cierto que es un juego con una ambientación medieval muy blanca. Por decirlo de alguna manera, una versión Disney de Tainted Grail. Desde las ilustraciones (magníficas como siempre de Vincent Dutrait) a la narración de los eventos. En este juego la sangre no salpica.
Como juego narrativo es muy sencillito. Me parece un intento por parte de Bauza de darle una vuelta de tuerca a su molde de Ghost Stories, ya adaptado a la Edad Media con su reimplementación Last Bastion, añadiendo una historia a cada escenario, algo bastante de moda en muchos juegos actuales, pero dirigido a un público más familiar. Es el típico narrativo en el que a la segunda partida del mismo escenario puedes saltarte perfectamente el preámbulo de leer los textos explicativos de cada evento.
Cuenta con unos componentes muy bonitos, es chulo de ver en mesa y se aprende enseguida jugando después de una explicación algo larga porque cuenta con bastantes reglas y mini-reglas. La partida se nos fue a una hora más o menos.
Personalmente disfruté de la partida pero las sensaciones que me dejó el juego fueron de tibieza. Es un juego que, al menos en su primer escenario, es mucho más fácil de batir que Ghost Stories juego que en su momento hubo quien etiquetó como imposible de ganar incluso en su nivel más fácil, característica muy propia de los antiguos cooperativos. Habría que probar el resto de sus escenarios para ver si la dificultad escala bien. Las decisiones que plantea me parecieron muy sencillas y algo inocuas, no eran casi a vida o muerte como en Ghost Stories donde las hostias van que vuelan y cada nuevo turno eleva el nivel de tensión.
El juego parece darle importancia especialmente a la generación de una historia. Y de ahí la cantidad de elementos que tiene el juego que, a mi repito personalmente, me sobran en comparación con Ghost Stories o incluso Samurai Spirit. De Samurai Spirit, un producto de Bauza semidesconocido, del que aquí en España sólo he visto algunas copias con reglamento en alemán, me fascina que con cuatro puñeteras cañas dentro de una cajita de menos de un palmo te monta una tower defense emocionantísima que se juega en 20 minutos. Pero, repito, esto ya es mis gustos personales.