Sin azar postdecisional no hay gestión de riesgos, y es un elemento que me encanta porque puede ganar la partida el más valiente en lugar del más listo.
El azar post-decisional es típico de la mecánica 'push your luck' de muchos fillers de cartas y/o dados. Algo que me encanta en este tipo de juegos, porque son cortitos e inyectan cierto drama (esta última tirada me ha dado la victoria!) a las partidas. Pero me gusta menos en juegos más largos, porque me produce frustración la sensación de perder una partida por 'esa última tirada'.
Precisamente yo pienso que el azar postdecisional bien implementado brilla más en los juegos largos (por ejemplo: wargames) en los que la victoria se decide tras una candidad enorme de situaciones de azar, en las que el "buen jugador" ha desarrollado su estratégia para dominar las probabilidades mientras que el "mal jugador" espera dar con la "tirada salvadora" en todo momento.