Vaya por delante que nunca había jugado antes a un juego narrativo y que mi idea del rol se reduce a una partida inacabada y a la lectura por encima de algún manual. Para mi este juego fue un descubrimiento de ese mundo y las dos veces que lo jugué, aún siendo un prototipo, disfruté del ingenio, a ratos realmente loco, que hace que aflore al jugarlo.
La premisa de un programa de radio que acaece mientras se juega, el sistema de las cartas y el que los jugadores juzguen, mientras juegan, la calidad del relato que generan durante la partida me pareció muy original y que cumple su propósito.
Felicidades Alejandro. Con un poco de suerte en 15 días tendré una copia del juego en España.