Bueno, por fin me he animado. Se trata de mi primera reseña, probablemente pesada y plomiza. Ya me contareis que os parece... espero que os guste
SPACE MARINE
En vista de la aparición en el foro de un anuncio sobre este juego, voy a realizar una mini reseña de él, para que aquellos que no lo conozcan, puedan saber algo más sobre él.
Space marine, es un juego de la compañía Games Workshop, mundialmente conocida por juegos como el Warhammer, ya sea en su versión fantástico medieval (Warhammer Fantasy) o en la futurista (Warhammer 40.000).
Este juego se engloba en el universo futurista de la saga Warhammer, se trata de una adaptación del Warhammer 40.000 para poder realizar batallas a gran escala. Para ello utiliza miniaturas muy pequeñas, que representan confrontaciones de grandes ejércitos. No estoy muy puesto en el tema de las escalas, así que no puedo indicar una escala como tal.
El juego ha conocido múltiples ediciones, siendo la más exitosa la segunda edición. Conocida como Space Marine. En su primera edición se llamaba Adeptus Titánicus y representaba batallas entre grades máquinas de guerra, siendo la infantería algo casi secundario. Esto cambió con la segunda edición, la cual presentaba un mecanismo de juego tipo wargame (como va a doler esto), con organización de ejercitos en unidades, grupos de combate y similares. Con un sistema sencillo en principio, que se fue complicando a medida que entraban en juego los difrentes tipos de unidades, ya que muchas de ellas tenían habilidades y características especiales. La segunda edición tuvo bastante buena aceptación, formando parte de la época dorada de la Workshop. Aparecieron las ampliaciones de Ork and Scuats Warlords, Renegades, Titan Legions. Cada una de ellas dedicadas a los ejercitos en liza de aquella época. Salvo el Titan Legions que incluia nuevas reglas y unidades para todas las razas, como los mega-titanes o los Knights.
Como es costumbre tras la segunda edición vino la tercera, la cual sufrió un cambio radical llamada en este caso Epic 40.000. En esta edición se intentó realizar una simplificación de las reglas para darle mayor dinamismo al juego, se produjo una unificación de todas las unidades agrupandolas en Infantería, Blindados, Artillería y Maquinas de Guerra. Esto provocó muchísima pérdida de jugabilidad y entretenimiento. Lo cual llevo a una caída bastante brusca de sus ventas y a la retirada del juego de forma oficial de la comercialización por parte de Games Workshop, que a partir de ese momento lo paso a un segundo plano situándolo en su línea de juegos de especialista.
Unos años después aparecieron dos líneas de actuación. La primera de ella de forma independiente a Games Workshop, revitalizó el juego retomando las reglas de las segunda edición, evolucionandolas y ampliandolas. Este es el denominado proyecto Netepic, que va ya por su quinta version de las reglas o Netepic gold.
La otra linea del juego es la oficial de Games Workshop, creando la cuarta edición del juego, retomando el nombre inicial en su línea de juegos especialista como Epica Armaggedon. Esta última no la he probado, pero parece ser que mantiene la línea de la tercera edición, según los diferentes foros que he leído, parece ser que el juego ha mejorado algo con respecto a la edición preferente, pero sin lograr alcanzar las cotas de jugabilidad de la segunda edición.
Para mi, este juego es y será un clásico ya que le dediqué muchísimas tardes en su día y aunque ya no juegue prácticamente porque mi antiguo grupo de juego se deshizo, sigo manteniéndome muy ligado a él gracias a Netepic y su comunidad.
El juego en sí es realmente sencillo, se construyen los ejércitos mediante la elección de cartas. Una carta de compañía principal y posteriormente hasta cinco cartas de unidades formando con ello un núcleo inicial de ejercito. Este proceso se repite hasta completar el límite de puntos pactado.
Tras eso se despliegan los ejércitos y a jugar. Se ponen marcadores de ordenes a las unidades (pueden ser cuatro, fuego rápido, avanzar, cargar y retroceder) cada una con sus características correspondientes. Tras dar ordenes a todo el ejército, se revelan las ordenes y a partir de ahí se resuelven cada una. Se presuponía fuego simultáneo, es decir, las unidades que eran destruidas en fuego rápido, no se retiraban hasta que se pasaba a la subfase de avanzar y disparaban antes de ser eliminadas. En el juego había que conseguir conquistar y mantener una serie de objetivos pactados previamente (en mi época jamás logramos respetar eso… siempre nos dedicábamos a la destrucción total del contrario).
En el juego tomaban especial importancia las grandes máquinas de guerra, siendo el resto de unidades fácilmente barridas por estas, se trataba de los Titanes, grandes máquinas de guerra armadas hasta los dientes que sembraban el caos y la destrucción por doquier, dejando cualquier batalla muy sosa si no se utilizaban. Ese era una de las virtudes y defectos del juego, que parecen haber solucionado bastante bien los chicos de netepic.
En fín un juego no para ser imprescindible, pero si lo bastante curioso y entretenido para poder dedicar una tarde ha jugar una batallita a el y disfrutar con las explosiones a lo largo de todo el tablero, y si lo has jugado difícilmente lo olvidarás
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