Es un juego ligero y, posiblemente el más familiar, una iniciación a los juegos de Feld. Aunque también tiene su dosis de estrategia.
Rápido y muy fácil de explicar. Lo puedes jugar con cualquier tipo de jugador, incluso con niños de 7 u 8 años.
A nuestro grupo de juego nos ha gustado ya que solemos compaginar juegos duros con ligeros y este va perfecto.