Un juego muy interesante, sobre todo para niños en torno a 8 años, porque con él aprenden a descomponer números sin apenas darse cuenta. Siempre he jugado con nueve tejas, nunca con doce, como en el caso que nos presentas. También hay una variante de diez tejas. Lógicamente el mayor reto es bajar todas las tejas, pero como resulta difícil y sólo se da de cuando en cuando, lo normal es jugar con puntaje, es decir, gana la ronda aquel que sumando el valor de sus tejas que quedaron sin bajar dé un resultado menor. Visto de otra forma, aquel cuyas tejas bajadas dan un resultado mayor es el ganador. Por algún sitio leí que es tradición que el jugador que "cierra la caja" (shut the box), aquel que consigue pleno bajando todas las tejas, tiene derecho a firmar la caja. En casa ya la hemos firmado todos, o sea que no es tan difícil, aunque hay que insistir para conseguirlo.