Las dos partidas que jugamos el día anterior en las mismas convivencias fueron sorprendentemente bien. De hecho, las jugamos con explicación incluida en unas tres horas y poco. Expliqué yo el juego y creo que acerté en comenzar por todo el rollo de las piezas que son comunes para todos los jugadores aunque se diferencian en cuanto a religión, además de explicar la importancia de los cubos/concesiones. A partir de ahí y repasando por encima el funcionamiento del mercado (eran dos jugadores que ya sabían del Porfiriana/Pamir) fue ir detallando cada acción.Y por último y creo que vital, explicar y dejar claras las condiciones de victoria.
Lo mismo digo de Madrid.
Es lo que tiene jugar con auténticos Hombres Renacentistas!