A mi , cuando le presento a alguien los juegos me pasa eso de que les gusta pero no los piden mucho mas.
En cambio cuando nos dió por los juegos de mesa recuerdo que el guillotine se convitión en un hedor que nos seguía a todas partes, siempre con el jodio guillotine hasta aborrecerlo. Y no es mal filler, pero oye, después de 100 partidas no apetece más.
Luego cuando nos dió por el Catan pues lo mismo, viciadas al catan sin mirar atrás. Ahora somos de los que van saltando de juego en juego y a veces hasta lo agradezco aunque es cierto que me gustaría profundizar más en muchos de ellos pero, quien tiene tiempo?.