Hoy he tenido algo parecido a una epifanía releyendo El Hobbit. Resulta que después de ver la peli unas cuantas veces, me han entrado ganas de releer el viejo libro amarillento que leí por primera vez allá por 1986 (ha llovido muucho) y me ha pasado algo parecido a lo que me ocurre cada vez que releo "Watchmen" de Alan Moore. Descubro cosas que se me habían pasado por alto.Así, se entiende que el siguiente párrafo, entre las páginas 165 y 166 de mi edición haya encontrado esto:"Cuando volvió en sí, vio alrededor la habitual luz gris y mortecina de los días del bosque. La araña yacía muerta a un lado y la espada estaba manchada de negro. Por alguna razón, matar a la araña gigante, él, totalmente solo, en la oscuridad, sin la ayuda del mago o de los enanos o de cualquier otra criatura, fue muy importante para el señor Bolsón. Se sentía una persona diferente, mucho más audaz y fiera a pesar del estómago vacío, mientras limpiaba la espada en la hierba y la devolvía a la vaina."O estoy bajo los efectos de un cóctel de peyote y aguardiente polaco de patatas o esto es un "Level up!" como una casa.Qué opináis?
Es que eso está en todas partes y en todas las épocas, un poco eso de que sí has visto una las has visto todas.Level Ups los hay por toda la historia: los doce trabajos de Hércules, el nudo gordiano de Alejandro Magno, etc... Tu mismo a través de tu vida también los habrás tenido.No sé, yo creo que sólo se trata de la altura de miras.
Totalmente de acuerdo en todo lo que dices. Por tanto, de nuestra tradición oral-lúdica tenemos como consecuencia la aparición de los juegos de rol (por mucho que las mentes cerradas digan que son cosas de raritos)como evolución lógica de todo ese bagaje cultural.Y en cuanto a la altura de miras, supongo que te refieres a la perspectiva, la cual voy ganando con los años. Pero eso me lleva a las siguientes preguntas: Es Tolkien implícitamente el creador de los juegos de rol? O somos nosotros que vemos (con nuestra perspectiva actual) cosas que simplemente estaban ahí pero no se aprovecharon hasta tiempo después? Es fruto de la casualidad?Gracias por aportar.
Tolkien no es implícitamente el creador de los juegos de rol. Si nos movemos por esos parámetros el origen del rol lo encontraríamos en Grecia. Se puede considerar a Tolkien como el que popularizó por primera vez un mundo de fantasía ordenado pero eso es mucho más discutible teniendo a figuras como Howard precediéndole, pero bueno.... parece ser que se le considera el padre de la literatura fantástica vox populi, y por tanto inspirador de muchas ambientaciones de rol.Si hay que nombrar un creador de los juegos de rol como la persona que los popularizó en el mundo es Gary Gigax que en una entrevista relata la primera partida improvisada de rol durante un juego de mesa de vikingos. La partida resultaba aburrida y decidieron llevar cada uno un vikingo estrapolando la tabla de combate del juego a combates individuales. A partir de ahí se fue ampliando el abanico de personajes y tablas...y lo demás es historia. Está demostrado que en muchas partes había cosas similares incluso anteriores (rol de mesa y papel), pero fue Gary Gigax el que posibilitó la comercialización de un producto y por tanto se le reconoce como el padre de los juegos de rol al igual que se considera a Richard Garfield el padre de los juegos de cartas coleccionables al popularizar Magic (aunque hubiera alguno anterior).
Estoy de acuerdo en darle crédito a Robert E. Howard o incluso al creador de la serie de Fafhrd y el Ratonero Gris ( no recuerdo el nombre del autor)
Los números adquieren mucha importancia.
Si..pero es curioso. Vale que Tolkien no hiciera tablas, pero si que en su obra, sobre todo en el Silmarilion, se destila un interés por dotar a su mundo de un orden. Primero histórico, pero también jerárquico al establecer medidas entre las diferentes entidades (maiar, valar, numeroneanos, ect). También a la hora de clasificar los anillos y las razas (los elfos estarían por encima de los enanos y luego vendrían los humanos ya que los anillos de los últimos serían menos poderosos).Quizás sea porque Tolkien era más lingüista que narrador, pero desde luego en toda su obra, el orden y la clasificación es fundamental. Los números adquieren mucha importancia.