Mi pareja es jugona sin excesos. Es raro que diga no a una partida e incluso propone juegos. Ahora nunca comprará un juego y no me ha puesto pegas para comprar lo que quiera.
Yo creo que hay dos cosas totalmente distintas, una es que te gastes el dinero que tienes en lo que quieras, que no debe reprocharlo nadie, y otra que te gastes el dinero que no tienes, en cuyo caso y con independencia de que sea en juegos, ropa, conciertos o lo que sea, es normal tener problemas con la pareja (sea hombre o mujer, que eso es lo mismo).
El otro día volví a escuchar un concepto que me hace tener sudores fríos (lo digo muy en serio, me da una mezcla de pena/miedo/asco que no puedo con ello): los "family points".
Yo tengo un par de amigos que hablan de los puntos de forma habitual. Cuántos sábados tengo libres,cuantos domingos debo, etc.La vida es así. Tengo un ámigo que era un bohemio tremendo, a punto de entrar en los 40 todavía salía la mitad de las noches de juerga. Vivía en un ático dedicado exclusivamente a sus placeres, entre ellos los juegos de mesa. Como es pintor y carpintero y tenía tiempo libre pues el salón de la casa estaba lleno de tableros que hacía él mismo para jugar a los juegos que le gustan con fichas de madera y en tableros enormes.Un día se arrejuntó con una chica y se fueron a vivir juntos. El ático duró 3 meses. Pillaron un piso normal y corriente donde íbamos ahora a jugar las partidas. A las pocas semanas el salón de la casa fue terreno vedado por su mujer para las partidas y nos relegó a una pequeña habitación. Todos sus tableros artesanales ya no cabían. No podíamos jugar ni cuando ella no estaba y el pobre cumplía las órdenes a rajatabla. Ahora está intentando conseguir puntos en forma de viajes vacacionales a zonas que no le importan lo más mínimo a cambio de poder tener más de un día para jugar a la semana (eso sí..en salón sigue siendo terreno prohibido).
Joder es que hay algunos/as que a sus parejas solo les falta esposarlos...Yo nunca le pondria restricciones a mi pareja en su hobby...
Un día se arrejuntó con una chica y se fueron a vivir juntos. El ático duró 3 meses. Pillaron un piso normal y corriente donde íbamos ahora a jugar las partidas. A las pocas semanas el salón de la casa fue terreno vedado por su mujer para las partidas y nos relegó a una pequeña habitación. Todos sus tableros artesanales ya no cabían. No podíamos jugar ni cuando ella no estaba y el pobre cumplía las órdenes a rajatabla. Ahora está intentando conseguir puntos en forma de viajes vacacionales a zonas que no le importan lo más mínimo a cambio de poder tener más de un día para jugar a la semana (eso sí..en salón sigue siendo terreno prohibido).
Cita de: juanikoct en 07 de Septiembre de 2016, 16:15:14 Joder es que hay algunos/as que a sus parejas solo les falta esposarlos...Yo nunca le pondria restricciones a mi pareja en su hobby...Por algo las llamarán esposas...Bueno, después de semejante gilipollez por la que pido mil perdones
pero hey, si así son felices es que les funciona y merecen mi respeto.