YGGDRASIL - Niveles de dificultad.

[SaLaS]

Breve opinión sobre la ajustable dificultad de este juego.

Primero os describo por encima las cartas, que como en Ghost Stories, marcan la dificultad y el final del juego.

42 Cartas normales, 7 por cada 1 de los 6 Dioses, que hacen avanzarlos 1 espacio hacia nuestra derrota.

10 Cartas especiales:

   6  Cartas de avance doble, el Dios correpondiente avanza 2 espacios.
   4  Cartas de Ragnarök: 1 carta que avanza los 6 Dioses, y 3 cartas que avanza 4 dioses

Este cooperativo tiene un gran arco de dificultad, y en las reglas no te marca los niveles, sólo te aconseja como se hace más o menos difícil.  

A ver, con el mazo de enemigos básico, sin ningún Ragnarok ni avances dobles, es pan comido, esto sería para muy novatos, no jugones, vamos.
 
Pero si le metes las 4 cartas de Ragnarok, además de hacer posible el avance de 4/6 Dioses en un turno, también aumenta el nº de cartas/turnos para conseguir la victoria. Aquí ya se pone la cosa calentita.

Y las 6 cartas de avances dobles (1 por cada Dios enemigo), pues eso, que avanza el Dios 2 casillas, pero no aumenta el nº de cartas/turnos, se sustituye por una normal. Y aunque no diga nada en las reglas, si ya se domina bien, pués también se podrían añadir, y aumentar aún más la dificultad 6 turnos extras. Son más light, pero si las metes todas, dejan de serlo.

Por cierto, a 1 jugador con el Dios que te da el poder de 1 acción más, disponiendo de 4 en lugar de 3, el juego se hace muuuuy fácil.

No se con varios jugadores, en solitario está bien, y como se puede ajustar muy gradualmente (+ 0-10 cartas especiales y turnos) el nivel de dificultad, una vez pillas el que mejor te va, las partidas son emocionantes.

Espero haber arrojado algo de luz sobre los que estáis interesados en este juego.

Un saludo.

[SaLaS]

Muchas gracias, SaLaS. Buen análisis.

 ¿Qué mazo usas tú?

El último que jugué, metí 2 cartas al azar de Ragnarok, y otras 2 de avance doble, sacando sus 2 correspondientes. A mitad de partida pensé que estaba siendo muy fácil, pero al final perdí a falta de 3/4 cartas para terminar el mazo de Dioses enemigos(única forma de conseguir la victoria).

Tengo que añadir, y no es excusa , que encadené muchas tiradas seguidas en blanco (2 caras de 6), sin hachas para sumar a los ataques a Dioses enemigos,así que gasté muy rápido todos los enanos que tenía, y sumado a que salió hacia el final un Ragnarok....todo se volvió en mi contra.

Cada Dios, con un poder diferente, hace que las partidas sean totalmente diferentes, y más o menos fáciles. Esta vez me tocó Odín, con el poder especial de sacar 2 cartas de Dios enemigo, eligiendo una y devolviendo al mazo la otra, encima o debajo, según convenga. Sentí que era pan para hoy y hambre para mañana, ese Ragnarok que salió al final, lo metí bajo el mazo algunos turnos antes... . Además, es un coñazo tener que hacerlo todos los turnos, en muchos era totalmente inútil, Odín en solitario nunca más ¡¡¡

Un saludo.