Bueno, el problema del Grande es que a corta (a un turno vista) tampoco lo hay. No puedes arriesgarte porque no conoces las cartas que saldrán al turno siguiente. Por tanto, se juega un poco a ciegas. Y mi teoria es que "casi siempre" (en un alto porcentaje) da igual en la posición que estes para elegir cartas, ya que todas suelen servirte o ser buenas. A mi sinceramente, no me atrae demasiado. Lo veo demasiada lotería. Salvando la estrategia evidente el turno anterior al que se puntua, lo demás es "a verlas venir".