Poder podria , pero mientras queden estanterias con huecos lo veo innecesario
La clave es quedarte sólo lo que te gusta y lo que te apetece jugar siempre, nada de “este juego es un clásico y hay que tenerlo”, “como me gusta mucho este autor compro todo lo que saca”, “este juego es el pepinazo de Essen de este año” o “lo conservo porque me dio muy buenos momentos en su época” (aunque ahora no lo jugarías casi nunca).
Este tema ha salido (no con estas palabras) en el interesante programa 125 de Vis Lúdica, cuando hablaban de lso tamaños de las colecciones y lo innecesarios de tener (salvo por coleccionismo o más bien por un "Diógenes" de manual) 400 juegos en las baldas.
Vamos a proponer un "mini-reto" ¿seríais capaces de encontrar un 25% de vuestra colección para ser sacrificada?