El Martes recibí en mi casa una copia de este juego, comprado en preventa junto con dos sets de figuritas prepintadas. Nunca antes había adquirido un artículo por preventa, pero es que el diseño artístico de éste me dejó el culo torcido desde el primer momento en que lo ví. Y, por fin, este Domingo he podido probarlo. Merece la pena? Bueno, para saberlo tendréis que seguir leyendo, vagazos, que queréis que os lo dé todo hecho
Lo primero, y aunque peque de redundante, he de decir que TODO el apartado artístico de este juego es ALUCINANTE. Todo, desde la portada a las instrucciones, de las cartas a las figuritas, está adornado con una cantidad de detalles, un colorido y una originalidad que entra por los ojos como ningún otro en mi estantería. Es, sin duda, el más "bonito" de todos cuantos tengo. Sé que para la mayoría este punto es meramente anecdótico, y que los peores juegos se esconden bajo coloridas y maravillosas portadas, pero siendo yo diseñador gráfico siempre peco de darle más valor a este asunto, y aunque luego en el tablero puede parecer lo mismo mover cubitos que figuras detalladas, la verdad es que, personalmente, creo que es un valor de cierta importancia. Eso no quiere decir que no juegue a juegos "feos", de hecho entre mis favoritos no hay ninguno que destaque especialmente por su grafismo, pero bueno, siempre es de agradecer. De todas maneras, he de decir que los personajes no han sido creados específicamente para el juego, sino que al parecer hay una serie de libros de rol basados en el mundo de Cadwallon, y los diseños han sido (o eso creo) reutilizados basados en los personajes más importantes. También hay un juego de cartas llamado Arcana que los utiliza.
Dicho esto, y para no extenderme mucho sobre las figuritas prepintadas de las cuales ya hablé aquí (
http://www.labsk.net/index.php?topic=58822.0), me centraré en el desarrollo del juego en sí.
Miiira que bonicos son...
Los componentes del juego son bastantes y variados: por un lado tenemos fichas rojas transparentes que nos servirán para seguir las acciones que hacemos cada turno (7 cada jugador), tenemos moneditas de tres colores distintos con relieves, que simulan ducados (la moneda de Cadwallon, y el principal objetivo del juego), luego tenemos fichas redondas para colocar bajo las figuritas y diferenciar los grupos por colores (cosa que se agradece), las mencionadas figuritas, de un plástico blando un poco malillo, como las del Tännhauser o Memoir, de un tamaño Warhammer muy aceptable, cartas de personajes tamaño normal, cartas de Arcano tamaño Arkham horror de las pequeñitas (tamaño que personalmente ODIO) que hacen el papel de las típicas cartas de apoyo "tira un dado más en combate" o "mueve un espacio más este turno", cartones de algo que no se distingue bien a lo que llaman "rastrillos" que realmente son vallas para cortar el camino cuando suena la alarma, cartones redondos con otros personajes de Cadwallon que se utilizan en alguna aventura e imagino se podrán utilizar mejor en futuras ampliaciones o aventuras hechas por la gente, fichas redondas con zombies, cartoncitos con baules por una cara y tesoros por el otro y cartas de aventura en las que salen tesoros. Creo que no me dejo nada. Aparte, tenemos el tablero, que es grande, un poco más del tamaño standard, y unos enormes cartones que son llamados "Aventuras". Dichos cartones tienen el tamaño de más de una cuarta parte del tablero, y sirven para seguir los turnos, incluir tres cartas pequeñas y decir cuatro líneas sobre la aventura que se jugará en esa partida. Bien, son absolutamente desproporcionados, si bien el resto de componentes en una mesa normal pueden entrar, esto no hay forma humana de meterlo de ninguna manera. Ni siquiera en las instrucciones donde te explican como colocar los componentes lo encajan de ninguna manera, simplemente lo meten ahí, al lado, ocupando un huecazo increíble. Es encima un engorro, porque las cartas que albergan son de máxima importancia durante la partida, ya que especifican el tipo de tesoros que has de recolectar para que te vayan dando monedas. Se podría haber arreglado con una tira con los huecos para los turnos, y una pequeña hojita donde te especificasen las cuatro tonterías de cada aventura, y fuera.
¡¿Dónde meto estos bicharracos?!
El sistema de juego? Pues bien, es sencillísimo, tardas cinco minutos en explicarlo... y es divertido como él solo. Cada jugador lleva a una banda de cuatro ladrones. Durante tu turno, deberás saquear casas en busca de monedas y tesoros, esquivando a los guardias, o "milicia" como se llama en el juego. Al llegar al quinto turno, la milicia da la alarma, y se cierran algunas salidas (las salidas cerradas las eligen los jugadores por turnos). Desde ese turno hasta el 7, tienes que huir de la ciudad con los tesoros, porque los personajes que al final del 7 turno no hayan salido, no puntúan los tesoros que tengan y encima reciben puntos negativos (-2 ducados, creo recordar). Tenemos 7 puntos de acción por turno. Mover un personaje cuesta uno, abrir un cofre con ganzúa tb (si fallas la tirada de abrir el cofre, pierdes la acción), atacar otro, y abrir un cofre a hostiazos, dos (si eres muy burro y no te apetece ir con ganzuitas, pues tienes la oportunidad, así se abren seguro XD). También podemos utilizar 3 acciones para coger una de las tres cartas de tesoros puestas en la misión en las cuales se muestra un tipo de tesoro, y recibir ducados según el número de ellas que tengamos. Los tesoros entonces no se descartan, sino que se mantienen, luego esta es la clave que en muchas ocasiones nos dará la victoria. Cada personaje puede llevar un máximo de 3 tesoros a la vez. Ahora bien, la gracia del juego está en que al principio de tu turno, lo primero que haces es tirar el dado y mover a la milicia contra tu enemigo, ya sea para atacarle o para taparle el hueco. Si atacas con la milicia un ladrón de algún contrincante y ganas, él pierde dos ducados que van al banco y tú le mueves 3 espacios hacia donde quieras (huye por patas). Si gana él, hace huir tres espacios al miliciano, pudiéndotelo colocar delante. Como los ladrones no pueden atacar a la milicia (por el rollo de no meterse en problemas con la pasma), tener un miliciano delante significa tener un muro, porque NINGÚN personaje puede pasar a través de NINGÚN otro, ni siquiera del mismo grupo. Y las calles son estrechas. Luego muchas veces nos vamos a ver cortándole el paso al enemigo para que no pueda escapar, dado que si entras en lucha de ladrón contra ladrón, no puede seguir moviendo dicho personaje hasta el turno siguiente. Cuando la batalla entre ladrones se da, ambos tiran dos dados. El que haya sacado puntuación más alta en uno de ellos, gana. Si empatan, gana el atacante. El ganador roba un tesoro al perdedor (o dos ducados si no tiene) y le hace huir 3 espacios. Esto es lo más gracioso del juego, porque el enfrentamiento entre los jugadores es CONTÍNUO, llegando al punto de preferir ir corriendo detrás del contrincante que tiene varios tesoros antes que meterte en una casa a afanar. Además cada uno lleva cuatro personajes distintos. Vale, paremos aquí un momento a analizar este sistema.
Las mayores quejas que he visto en la bgg sobre el juego (de los pocos que lo tienen ya) es respecto a que TODOS los personajes tienen las mismas características, a saber, todos tiran dos dados de batalla (en principio), todos mueven 4 espacios y todos deben sacar un cuatro o menos en 1D6 para abrir un cofre. Esto significa que el Orco cuya figura ocupa casi el doble que una normal, ataca igual que el enano más ínfimo, se mueve igual de rápido que el tío que va levitando, y abre cerraduras con la misma delicadeza que la más sibilina fémina recién hecha la manicura. Esto resulta muy chocante. Antes de jugar, cuando lo ví, me pareció un punto muy negativo. Eso sí, cada personaje tiene una habilidad propia. Pero las habilidades realmente no resultan demasiado personales, pues si bien en algunos casos si son "súmale uno a su mayor puntuación en lucha" en los tíos grandes o "atraviesa muros en forma fantasma", la mayoría de las veces se limitan a "cuando ataques y ganes, roba una carta", o "quítale una carta al rival que tengas en una casilla adyacente", "puedes descartar una carta para robar otra", etc, cosas muy genéricas que en ocasiones ya puedes hacer con algunas de las cartas, y que no definen la personalidad de un personaje. Esto hace un efecto extraño, un poco de "tengo a este bicharraco con aspecto de mago chungo, con un muñeco vudú atado a un palo y los ojos rojos... que me da dos monedas adicionales al final de la partida. Te da la sensación de que realmente los personajes sean más fichas, que personajes. Ahora bien, esta era mi impresión antes de jugar. Una vez en el juego comprendes la decisión del creador. Y es que este juego no pretende ser un Comand & Colors, ni de lejos un juego sesudo ni estratégico. Es un juego rápido, donde se prima la diversión por encima de todo, y donde cada vez que quieres atacar sabes que son dos dados y punto, y si tu personaje tiene la habilidad de tirar un dado más, lo sabes a la segunda vez que mires su carta, y no te tienes que tirar cinco minutos cada vez mirando cuánto tiene éste, si ese tiene más que yo o cuánto le haré a ese otro. Atacas, dos dados, saco 4 y 5, él saca 1 y 6, mi mayor es el 5, el suyo el 6, ha ganado, me quita tesoro y me manda corriendo a tomar por saco. Fin. No hay ninguna complicación, rara vez te verás consultando las reglas de nuevo, es todo rápido, divertido y sencillo. La partida con explicación no llega a la hora, para que os hagáis a la idea.
Eso no es un cuchillo... ESTO es un cuchillo.
Entonces, el juego funciona? Sí, todo encaja. Es divertido? De los más a los que he jugado. Es estratégico? Bueno, los pasillos son estrechos, de una casilla, y no se pueden atravesar personajes del contrario ni propios, así que hay cierta estrategia a la hora de colocarlos para putear al contrario o llegar a la salida, pero vamos, no es un Twilight Struggle XD. No llega a ser un filler, pero si un juego sin pretensiones para empezar la velada, putear a los colegas y entrar en calor, o simplemente para echarte unas partidas con no gamers porque van a ir como locos a pedirte más. De hecho, es un excelente juego para iniciar a no jugones: entra por los ojos, es sencillo, es divertidísimo, puedes putear y el que haya jugado más tampoco tiene por que ganar más especialmente, dado que es tan sencillo que es fácil dominarlo desde un principio.
PROS:* Diseño artístico SUBLIME.
* Minis acojonantes.
* Entra por los ojos completamente.
* Muy divertido.
* Funciona muy bien a 2, aunque se recomiende a más.
* Excelente juego para iniciar a no jugones.
* Sencillo y sin pretensiones, no te vas a quemar la cabeza viendo dónde meter la oveja si tu compañero te ha jodido horneando pan esa ronda.
* Tiene 8 aventuras distintas que le dan variedad a las partidas, cosa que fomenta su rejugabilidad.
* En una hora has finiquitado (y aún te sobra tiempo para ir al baño, mear, y darle una palmada en la espalda con la mano con la que te has sujetado la chorra al que ha ganado la partida).
* Da pie a ampliaciones, sobre todo de aventuras y personajes (aunque como los tableros de aventuras son enormes, el precio estará peor ajustado que con otros juegos).
* Mucho enfrentamiento directo, y risas y lloros.
CONTRAS:* El plástico de las minis en blandurrio, no me acaba de convencer.
* El acabado de las minis prepintadas es irregular, mientras que algunas son alucinantes, otras están a medio terminar.
* Tiene dados, así que si no te gustan los dados, vas jodido.
* No es cerebral, ni estratégico, ni rebuscado, ni tiene toques de RPG a lo runebound... ni lo pretende. Es lo que es sin engañar a nadie.
* Habría estado bien imprimir por la otra cara de las cartas de personaje una versión con características distintas entre sí, a modo de "juego avanzado". Aunque a la hora de jugar no lo echas en falta, le daría sin duda un paso de profundidad al juego.
* El tablero está impreso por una cara sólo, ya puestos a pedir otro escenario habría estado bien.
* Por qué son tan ENORMES las fichas de aventura??? Son poco prácticas, no caben en la mesa y en la mayoría de los casos se limitan a un pedazo de dibujo enorme y tres párrafospequeños de texto.
* Las cartas de arcano son demasiado genéricas (tira un dado más, mueve uno más) y hay muy poca diversidad (quizás hay diez distintas en total).
Así que mi valoración final del juego es muy favorable, un juego divertido para pasar tres cuartos de hora de risas con tus colegas sin quebrarte la cabeza, quizás de los mejores en lo que pretende.