Pues hoy Donegal, Erwin, Reinhart, thunder_cc y un servirod hemos jugado otra partidita al Revolution en la que la pérfida y sibilina Nobleza ha vuelto a llevarse el gato al agua con toda rotundidad.Cada vez tengo más claro que en una partida a cinco jugadores, como el Habsburgo y el Católico no aten muy corto a la Nobleza desde el turno 0 luego es bastante difícil pararle los pies.Aunque cierto es que era yo el que comandaba a los nobles y he contado con la enorme ventaja de que el resto de jugadores eran completamente novatos. Encima las negociaciones y alianzas han brillado por su ausencia y ha habido mamporros a mansalva entre Reformistas y Católicos en Utretch, Burgueses y Reformistas en Holanda, Habsburgos y Burgueses en Genderland, Católicos y Habsburgo en Luxemburgo,... Lo cual ha beneficiado aún más a la Nobleza que no se ha metido en ninguna batalla y se ha aprovechado de la debilidad de Católicos y Habsburgos para irles comiendo provincias importantes del Sur como Brabante o Hainault.Por cierto, en las partidas anteriores habíamos jugado mal una regla muy importante de la fase de Conflicto, y es que el exceso de unidades de una facción después de que todo el resto de facciones han sido barridas de una provincia no se elimina sino que se queda en dicha región.Lo cual hace aún más sutil y estratégica la colocación de nuevas unidades en cada turno. Incluso permite jugar a tirarte faroles con el contrario para obligarle a poner influencias de más en una provincia, las cuales luego no podrá ya utilizar en todo el resto de la partida.En cualquier caso, creo que todos hemos disfrutado mucho y nos hemos quedado con ganas de montar otra partida en un futuro no muy lejano. Así que parece que poco a poco vamos ampliando el círculo de fans del juego.