Los componentes me gustan, a excepción de las cartulinas de los terrenos del monasterio, que me parecen de chiste. Lo suyo hubiera sido un cartón del grosor del agricola, esto es cartulina cutre, y por el precio del juego me parece un poco tomadura de pelo, por mas cartón que lleve.
Pues por lo que estáis contando del juego, es exactamente el tipo de juego que más detesto dentro de los eurogames, el hacer trilerismo con los recursos a ciegas hasta la quinta partida cuando empiezas a vislumbrar algo decente. Por eso odio el Le Havre, Vinhos, ...Ahora sólo me queda rezar para que Fran Moli no se lo compre y nos haga jugarlo en un próximo día del gañán.