This War Without an EnemyEl título lleva a engaño pues cualquier bando de esta guerra, desde nuestro continental punto de vista, es un claro y antiguo enemigo. Los tiros van más por el caracter civil de esta guerra: sí, los ingleses también las tuvieron, y no pocas.Juego de Scott Moore, un tipo muy simpático que nos acompañó en las Bellota Con III y con el que se puede bromear sin problemas sobre banderitas y otros trapos: un tipo inteligente de 10, por tanto. El juego, estéticamente, es muy llamativo. Personalmente me encanta las ilustraciones de bloques y reglamento, y con el mapa tengo un sentimiento encontrado: bonito, pero paleta de colores demasiado fantasiosa. Parece que van a salir orcos del Warcraft.El juego usa los mimbres de los "columbia" de toda la vida, pero con cosas que lo convierten en una experiencia un paso por delante de los canónicos de dicha casa. La narrativa de eventos es importante, y los hay ciertamente poderosos, personalizados para ambos bandos, lo que recuerda ligeramente a un cdg serio tipo PoG. Las batallas tienen decisiones más allá de la retirada y los automatismos del Hammer of the Scots y su familia, con la caballería como protagonista: primero se enzarza con la contraria hasta que un bando se desbanda o huye. Luego hay que tirar para controlarla, porque puede que aun victoriosa, no vuelva a participar por el descontrol y la persecución (esto le da un sabor histórico total, pues ocurrió bastante en la guerra). La infantería debe decidir en cada ronda si dispara sus mosquetes con modificador negativo o se enzarza a las picas a plena potencia. Finalmente asedios duros en los que si no llevas artillería, mejor esperar a que el hambre haga su trabajo.Bloques regionales con problemas para abandonar sus zonas, mamoneo francés, irlandés y escocés, golpes de mano, movimiento naval... Muy, muy logrado y divertido.Los parlamentaristas empiezan con un ejército de mercaderes, hombres de negocios y curas que da pena verles, y con la muralla de Londres sin los bricks puestos. Carlitos se pone lirondo, claro, porque la flor y nata de la aristocracia monárquica da hostias como panes. Sin embargo, su caballería es mucho de hacer el Stuart antes de Gettysburg, y a veces salen a por setas. Luego ya vienen los covenant oliendo a haggis y, sobre todo, el New Model Army, y ahí el de los cañones, puritano recalcitrante por otro lado, puede empezar a devolverlas. Lo importante, como todo en la vida, es decapitar a un rey al final de la partida.No la hemos finalizado, pero he de decir que me ha dejado mejor sabor que los bloques clásicos.Tras un choque inconcluso, aunque me he llevado la peor parte, he subido al ejército parlamentario a aliviar el asedio del puerto Hull, que proporciona el control del Mar del Norte.Mientras el ejército monárquico subía por las Midlands he conseguido tomar York y decir TRES VECES a Sergio lo de: "No le diré a mi tío que he perdido la ciudad más grande del norte de Inglaterra". Cabeza a la cesta.La flor y nata de la caballería noble saca una nefasta tirada y sale por patas: todo en vano, puesto que mi infantería está a punto de sucumbir.Pero la foto es bonita, ¡qué diantres!El ejército realista está muy tocado y pronto llegarán mis escoceses. Además, el riesgo sobre londres es mínimo.En error al jugar una carta hace que el complot realista se frustre en Plymouth.Todo abierto.
Es por áreas (aunque bueno, es un criterio gráfico, áreas es lo mismo que puntos como malla matemática). Mejor que el Hammer sin duda: el cuello de botella Edimburgo Glasgow es el eterno problema para un juego que, temáticamente, mola mucho. Que el Juilus Caesar tendría que jugarlo más. Es un poco más complejo, pero el Julius es mucho Julius. Mejor que el Richard III creo que sí.
Yo ando jugando a unos juegos que he diseñado yo mismo, basados en mecánicas de juegos ya existentes que me han gustado. El desarrollo de cada juego no suele llevar más de 8 horas, ya que tengo sistematizado el diseño de mapas y fichas.-TENNESSEE-OCS: Este es un juego con reglas OCS, basado en una hipotético guerra entre los USA vs Confederados en 1917, como parte de la primera guerra muncial. La ambientación está basada en el juego Mason-Dixon de la revista Command que me encanta, después de aplicar muchas "House rules".-SANTANDER 36 JoV. Después de hechar una partida al Jaws of Victory, me propuse crear un escenario más asequible utilizando las reglas de este juego. Como acababa de leer un libro sobre la conquista de Cantabría en la guerra civil, me puse el fin de semana pasado a hacer el juego.Llevo un par de turnos de juego en los que los republicanos están defendiéndose mucho más fuertemente que en su desempeño histórico. Habrá que afinar los valores de combate.
Cita de: Spectrum en 04 de Febrero de 2021, 20:25:45 Yo ando jugando a unos juegos que he diseñado yo mismo, basados en mecánicas de juegos ya existentes que me han gustado. El desarrollo de cada juego no suele llevar más de 8 horas, ya que tengo sistematizado el diseño de mapas y fichas.-TENNESSEE-OCS: Este es un juego con reglas OCS, basado en una hipotético guerra entre los USA vs Confederados en 1917, como parte de la primera guerra muncial. La ambientación está basada en el juego Mason-Dixon de la revista Command que me encanta, después de aplicar muchas "House rules".-SANTANDER 36 JoV. Después de hechar una partida al Jaws of Victory, me propuse crear un escenario más asequible utilizando las reglas de este juego. Como acababa de leer un libro sobre la conquista de Cantabría en la guerra civil, me puse el fin de semana pasado a hacer el juego.Llevo un par de turnos de juego en los que los republicanos están defendiéndose mucho más fuertemente que en su desempeño histórico. Habrá que afinar los valores de combate. Que interesante!!. ¿Y como haces los mapas?