El Espía (que se perdió) (reseña)

Un magnífico juego de deducción y engaño que acaba de salir en español gracias al buenhacer de Zacatrus que sin duda nos proporcionará grandes momentos de diversión y partidas épicas. El Espía (que se perdió) es un juego de identidades secretas de 3 a 8 jugadores (quizás el número idóneo sea 5-6 jugadores) y unos 15 minutos de duración creado por el autor ucraniano Alexander Ushan (que al menos en mi caso era un completo desconocido).

COMPONENTES

El juego trae 240 cartas con el mismo reverso (210 cartas de ubicación y 30 de Espía), 30 bolsitas zip y un reglamento.

Las cartas de ubicación representan 30 localizaciones distintas (Avión, Embajada, Restaurante, Base Militar, Hospital, Colegio, Casino, Submarino, Teatro, Submarino, Supermercado, Carnaval…) con un colorido diseño y unas atractivas ilustraciones, que por otra parte son todo un acierto para el desarrollo del juego. El hecho, además, de que haya tantas garantiza una cierta rejugabilidad, lo cual es de agradecer. En la parte superior de la carta está el nombre de la localización y en la parte inferior el nombre de uno de los personajes presentes en la misma (Ej: Zoológico – Guía).

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Las carta de Espía simplemente representan a un simpático espía «con las antenas puestas».

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PREPARACIÓN DEL JUEGO

Las 240 cartas con el dorso idéntico las tendremos que separar en 30 grupos que corresponden con los típicos y tópicos escenarios en los que podremos jugar. Cada escenario consta, por tanto, de 7 cartas idénticas y una más que es la carta del espía. Esos grupos de 8 cartas cada uno, se meterán en las bolsitas zip que vienen incluidas en la caja del juego y con esto, estaremos listos para empezar.

Luego, se elige al azar una de las 30 bolsitas zip, se reparten las cartas en secreto para no perder el misterio y se empieza la ronda de preguntas.

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DESARROLLO DEL JUEGO

A grandes rasgos se trata de un divertido juego de mesa de roles ocultos, donde el espía tiene que averiguar donde están el resto de jugadores y estos tienen que averiguar quién es el espía. Simple y efectista.

La gracia del juego consiste precisamente en la manera que hay para deducirlo y que se base en la formulación de preguntas insidiosas del estilo ¿es un sitio romántico? ¿huele a cuadra? ¿tu mama te llevo de pequeño allí? ¿qué ropa llevas puesta?. A veces las preguntas claras y directas son las mejores, y permiten que la creatividad del otro jugador brille. Si detectas que titubea o tarda demasiado en buscar una respuesta, quizás lo has descubierto. Aquí entran en juego la atención y la buena improvisación en el momento en que el espía tenga que responder a una pregunta. Y esa es la tensión de la diversión del juego: debes ser inteligente y formular preguntas útiles, pero no demasiado  inteligente. Necesitas al menos un aliado; y esto es muy difícil de obtener. Además deben ser preguntas e indirectas, siempre teniendo en cuenta que te interesa dejar claro que sabes de qué sitio se está hablando, pero sin ser demasiado claro para que el espía no se entere. Y lo mejor, sin duda, es que (casi sin quererlo) da lugar a situaciones cómicas e hilarantes que son un verdadero descojone ver cómo se desarrollan y hacia donde deriva la partida.

Cuando un jugador tiene su turno debe realizar una pregunta relacionada con su personaje o con la ubicación a otro jugador de su elección, que deberá responder y a continuación hacer otra pregunta a otro jugador cualquiera (excepto el que le preguntó a él). De esta manera el juego continua, en una especie de juego del gato y el ratón, en un número variable de preguntas con las que los jugadores tratarán de que el espía se delate para poder así acusarle, y el espía intentará averiguar dónde se encuentran cada uno de ellos para poder desvelar sus localizaciones antes de ser descubierto.

Cada jugador puede detener el reloj para acusar a otro jugador de ser un espía. Entonces se vota. Si el grupo vota por unanimidad, el jugador acusado muestra su carta. El equipo gana si la carta revelada es un espía; el espía gana si no es un espía. Si el voto no es unánime, el juego continúa.

El espía también puede detener el reloj en cualquier momento para intentar adivinar la ubicación en la que el equipo se encuentra. Si su suposición es correcta, el espía gana. Si no es así, el equipo gana.

Una vez acaben los 7-8 minutos del reloj (la duración puede ser variable y se determina al principio de la partida) de los que consta la ronda, los jugadores pueden hacer una última acusación final (el espía ya no puede adivinar la ubicación). Si el espía se revela en la acusación, el equipo gana. De lo contrario, el espía gana.

Finalmente, hay un sistema de puntuación que recuerda ligeramente al Dixit en el que se lleva la cuenta a través de múltiples rondas (normalmente se juegan 5).

OPINIÓN PERSONAL

Estamos ante un magnífico juego social (o party) con componentes de roles ocultos, deducción y engaño. Uno de los puntos que hacen que El Espía (que se perdió) sea especialmente divertido es el hecho de que todo el mundo está involucrado tanto en la parte de deducción como en la de faroleo, así que todo el mundo tiene cosas que hacer.

Dada su corta duración, la sencillez de sus reglas y el número de jugadores que permite, hace que sea un juego ideal para grandes citas, jornadas o kedadas, para jugar o desengrasar entre partidas o cuando el grupo comienza a ser lo suficientemente numeroso.

Es el típico juego, que según donde y con quién se juegue, es una apuesta segura. Considero que es un soplo de aire fresco a este tipo de juegos y el simple hecho de formular preguntas, cuanto más variopintas y divertidas mejor, hace que termine con risas aseguradas.

Un party que sigue la estela de juegos como Manzanas vs. Manzanas, Dixit y similares, en el sentido que la creatividad e imaginación de los jugadores es muy importante. Se necesita frescura.

El Espía (que se perdió) está en la misma liga que juegos como Los hombres lobo de Castronegro, La Resistencia, Coup, One Night Ultimate Werewolf y similares. Así que si te gusta este tipo de juegos, no dudes en hacerte con una copia, o lo lamentarás. Solo para jugadores sagaces y astutos (o al menos que lo crean).

Su PVP 19,95€ (un buen regalo)

Ficha en Zacatrus!:
http://zacatrus.es/el-espia-que-se-perdio.html

Ficha en BGG:
https://boardgamegeek.com/boardgame/166384/spyfall

  • Agradezco a Zacatrus la copia cedida para realizar esta reseña.
  • Las fotos para esta reseña las he tomado navegando por google y pertenecen a sus respectivos autores.

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