Acabo de descubrir y entender, entre risas y alegrías, por se clonan (copian, homenajean) los juegos de mesa en Alemania. Por lo visto Helmut Kohl debe ser una especie de Fu-Manchú contemporáneo, que está fabricando un ejército de mujeres despampanantes, y parece ser que una de sus copias favoritas es Scarlett Johansson. Así pues, si hacen copias de féminas «calentorras», ¿por qué no van clonar juegos de mesa?
Y mucho peor, ¿Y si Klaus Teuber a su vez es un clon de otro germano? Esto seguro que da para un buen argumento de una novela o película de ciencia-ficción.